Corrupción, la palabra que no conseguimos olvidar
Ser consciente de la enorme quiebra que genera la corrupción en la sociedad exige asumir las responsabilidades políticas que tocan, contribuir a una cultura institucional que destierre estos comportamientos y aplicar la lista de reformas pendientes. Es necesario demostrar que no hay brecha entre lo que se dice y lo que se hace. De otra manera ¿cómo se puede pedir a los ciudadanos que confíen en sus representantes?