Cambio Climático
Los negacionistas del cambio climático, a por el Papa
Hemos tirado de hemeroteca para rescatar algunos de los dardos que la bancada del Partido Republicano y su entorno mediático ha lanzado contra el papa Francisco.
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Son norteamericanos, ultraconservadores y simpatizan con el Tea Party. Defienden sin pudor la versión más salvaje del capitalismo y niegan el calentamiento global. Este Papa, que clama contra la desigualdad y los excesos del sistema, no les gusta. Incluso les parece «un marxista».
A los negacionistas del cambio climático, el último terremoto desde el Vaticano les ha llegado en forma de Carta Encíclica de tinte ecologista y bajo el título Laudato si. En su misiva, Francisco traza un duro análisis sobre la responsabilidad de los gobiernos y grandes empresas de los países más poderosos del mundo por su contribución al cambio climático y a la pobreza. Para Bergoglio, el consumismo y el capitalismo salvaje son los responsables de la degradación del planeta.
Pero si no oyen las advertencias de la comunidad científica, ¿por qué iban a respetar los argumentos de un Papa tan heterodoxo? Hemos tirado de hemeroteca para rescatar algunos de los dardos que la bancada del Partido Republicano y su entorno mediático ha lanzado contra el papa Francisco:
1) El tertuliano satírico Greg Gutfeld declaró en Fox News que a Bergoglio «le faltan unas rastas y un perro con un pañuelo para unirse al movimiento Occupy Wall Street». «No quiere ser un Papa abuelo, quiere ser un Papa moderno», añadió.
2) Jeb Bush, exgobernador de Florida y posible candidato a la presidencia de Estados Unidos por el Partido Republicano, mostraba su ADN de ‘halcón’ en New Hampshire: «Espero que el cura de mi parroquia no me castigue por decir esto, pero no dejaré que dicten mi política económica ni mis obispos ni mis cardenales ni mi Papa». Aunque Bush se convirtiera al catolicismo hace 25 años, la nueva encíclica se le ha atragantado. «La religión debería ocuparse de hacer mejores a las personas y menos de cuestiones que tienen que ver con aspectos políticos», sentenciaba.
3) A raíz de que Bergoglio publicara la exhortación apostólica Evangelii Gaudium, en la que rechazaba las teorías que sostienen que el libre mercado hace que la riqueza tarde o temprano llegue a todo el mundo, el locutor norteamericano Rush Limbaugh exclamaba en su célebre programa de radio: «Eso es puro marxismo saliendo de la boca del Papa».
4) Quizá la crítica más esperpéntica venga de la mano del republicano Jim Inhofe, presidente del Comité Medioambiental del Senado de Estados Unidos, que ocupó hace unos meses los titulares de la prensa por presentarse con una bola de nieve en la Cámara como prueba de que el cambio climático es «un fraude» e invitando al Papa a «preocuparse de sus propios asuntos».
5) También desde la cadena de televisión Fox News, el periodista Adam Shaw comparó la popularidad del Papa con la que disfrutó Barack Obama en sus primeros días como presidente de Estados Unidos: «Igual que el presidente Obama ha sido una decepción para Estados Unidos, el papa Francisco demostrará ser un desastre para la Iglesia católica».
Opinión pública
La ola de críticas por parte de conservadores estadounidenses hacia el Papa debido a su «ambientalismo radical», como lo han calificado algunos medios, contrasta, sin embargo, con lo que dicen las encuestas. Según los datos del Pew Research, un 86% de ellos tiene una visión positiva del Papa y un 71% reconoce que el planeta se está calentando.
Pero esta misma encuesta también refleja la división partidista entre los católicos estadounidenses cuando hablamos del calentamiento global. El 50% de los católicos republicanos considera que hay pruebas inequívocas de que la temperatura de la Tierra está aumentando, frente a un 80% de los católicos demócratas. Además, sólo una cuarta parte de los católicos republicanos cree que el hombre tiene algo que ver con el cambio climático, mientras entre los demócratas la cifra se sitúa alrededor del 60%.
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