Teletrabajo en clave rural para frenar la despoblación

Después de más de quince meses conviviendo con una pandemia, si hay una realidad que la sociedad española ha interiorizado –junto con las mascarillas y el distanciamiento social–, esa es la del teletrabajo. Una respuesta laboral planteada como solución temporal que no solo define el presente, sino que podría convertirse en el futuro para muchas empresas y trabajadores. En la actualidad, el teletrabajo es una realidad para buena parte de los empleos. Y ha venido para quedarse.

Pero no es una revolución digital novedosa: ya veníamos conviviendo –tímidamente– con ella desde hacía varios años. Sin embargo, la crisis sanitaria global la ha afianzado a pasos agigantados. Trabajar de forma online desde cualquier parte del territorio –o del mundo– entra en juego con otro fenómeno con el que llevamos surgido hace décadas: el abandono progresivo de las zonas rurales fomentado por la idea de que si alguien quiere triunfar profesionalmente, solo puede hacerlo de forma presencial en las grandes ciudades. Esta teoría queda ahora invalidada por el último año de trabajo en remoto, un cambio de paradigma en el que muchos han optado por bien volver a los pueblos que abandonaron hace años, o bien por instalarse en ellos como nuevos moradores.

La Red Nacional de Pueblos Acogedores para el Teletrabajo pretende dinamizar y repoblar aquellas zonas rurales escasamente pobladas

En este nuevo contexto de apuesta por lo rural nace la Red Nacional de Pueblos Acogedores para el Teletrabajo, una iniciativa impulsada por El Hueco, en colaboración con Grupo Red Eléctrica y Booking.com, que busca la reactivación de los entornos rurales a través de tres patas fundamentales: el desarrollo de la electricidad procedente de energías renovables, la reducción de la brecha digital a través de la mejora de la conectividad y el fomento de la innovación local. Desde Grupo Red Eléctrica tienen claro que la apuesta de futuro debe ir por esa línea y, como empresa comprometida con la idea de solventar muchos de los retos actuales de la España rural, ha incorporado la innovación social como elemento clave para impulsar la creación de valor compartido. Una postura que se centra en proyectos innovadores y sostenibles, tejiendo redes y apostando por el talento.

También con una meta similar, y en esa apuesta por los pequeños municipios, Grupo Red Eléctrica apoya la iniciativa Holapueblo, que busca revertir la despoblación de las zonas rurales apoyando a emprendedores para instalarse en los municipios y desarrollar desde allí sus ideas de negocio. A través de este tipo de iniciativas se genera un impacto positivo en las comunidades rurales, una reactivación económica de los territorios a la vez que se acelera el cumplimiento de la Agenda 2030.

Cobertura 4G, alojamientos a precios asequibles, espacios de coworking e incluso una persona anfitriona por pueblo que hace las funciones de cicerone para los nuevos vecinos. Así es la estrategia de la Red Nacional de Pueblos Acogedores para el Teletrabajo, que se centra en hacer de los pueblos destinos atractivos para el trabajo en remoto, garantizando las condiciones necesarias para desarrollar una vida laboral a distancia y, a su vez, promoviendo el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 11 –ciudades y comunidades sostenibles–. Con este proyecto ganan todos puesto que la iniciativa también se plantea como una solución viable que ayude a repoblar zonas rurales escasamente pobladas.

En conclusión, la red aúna diferentes pueblos españoles para los que la revolución digital supone una oportunidad. Aquí, conceptos como ‘nómadas digitales’, ‘deslocalización’ y ‘aprendizaje mutuo’ cobran sentido de la mano de esta propuesta que recupera el protagonismo a los pueblos hermanando empresas privadas, organizaciones de la sociedad civil y pequeños municipios. ¿Quién no ha soñado con terminar de trabajar y pasear por un bosque cercano? O con criar a sus hijos en contacto con la naturaleza sin renunciar a su carrera profesional. O con la cercanía, tranquilidad y calidad de vida que aporta un pueblo. Porque si el presente es el teletrabajo, potenciar proyectos de vida en los pueblos es el futuro.