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«El unicornio hoy simboliza la libertad, el inconformismo y el movimiento queer»

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17
mayo
2024

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Portador de propiedades mágicas, de aspecto mítico y de una belleza delicada, pese a desafiar la simetría que suele imperar en la naturaleza, símbolo de Cristo y del movimiento queer, la figura del unicornio ha fascinado desde la Antigüedad, tanto en Occidente como en Oriente. Los investigadores alemanes Julia Weitbrecht (Ostfildern, 1976) y Bernd Roling (Lingen, 1972) han retomado a esta criatura para realizar un recorrido antropológico, cultural, político y religioso. El resultado: ‘El unicornio. Historia de una fascinación‘ (Siruela). Hablamos con Roling sobre los hallazgos que publican en su último libro. 


En 2016, una noticia informaba de que se habían encontrados restos prehistóricos de un animal que podría ser un unicornio, algo que después se comprobó que era falso. ¿Qué nos aportan y qué simbolizan las criaturas mágicas como el unicornio? ¿Por qué necesitamos creer en ellas?

Al parecer, nuestra imaginación necesita criaturas que sinteticen nuestros sueños e ideas de perfección, así como criaturas que articulen nuestros miedos. El unicornio, que hoy podría reivindicar una función casi terapéutica, sería un ejemplo del primer tipo de criaturas fantásticas que unifican una cadena de aspectos positivos: belleza, salvajismo, libertad y un papel curativo. Los dragones son un ejemplo del segundo tipo. Además del romanticismo que aglutinan, en la era moderna también podrían desempeñar un papel de conciencia culpable. Al fin y al cabo, la biodiversidad está desapareciendo rápidamente y reivindicar criaturas como los dragones o los unicornios respondería a la necesidad inconsciente de preservar algunas especies raras, al menos en nuestra imaginación.

Encontramos alusiones a seres similares al unicornio en la Biblia, en los textos del médico Ctesias de Cnido (s.V a.C.) o en los de Claudio Eliano (siglo II), pero, ¿en qué momento el unicornio se configura como el ser que hoy conocemos, con su cuerno helicoidal, sus propiedades mágicas y su nobleza?

En cuanto a su aspecto externo, los primeros unicornios, tal como se describen en la zoología clásica, eran bastante pequeños, en comparación con el unicornio «contemporáneo», y se parecían más a un antílope. Sin embargo, ya entonces eran coloridos, peligrosos y, según los autores, su cuerno estaba dotado de cualidades mágicas, como la capacidad de neutralizar venenos de todo tipo, algo que se mantiene en épocas posteriores. Cuanto más nos acercamos a la época moderna temprana, más grandes se vuelven los unicornios. El hecho de que los cuernos –en realidad colmillos de ballenas– se vendieran desde la Edad Media probablemente también fue una razón para asentar la forma de los unicornios en la imaginación de los estudiosos, porque los cuernos requieren una anatomía adecuada.

«Nuestra imaginación necesita criaturas que sinteticen nuestros sueños y que articulen nuestros miedos»

La figura del unicornio no solo prevalece en Occidente, sino también en Oriente (el mayor sabio en lengua árabe, Al-Biruni de Corasmia, lo menciona). ¿En Oriente se recogen las propiedades mágicas que le atribuimos los occidentales?

Los eruditos occidentales y orientales dependían en gran medida de las mismas fuentes clásicas, fuentes que ya incluían el conjunto principal de habilidades que tenía el unicornio. Cuando Al­Qazwini elaboró su enciclopedia, conocía muy bien la tradición griega, por lo que también su cuerno de unicornio era capaz de curar enfermedades o ayudar contra las intoxicaciones, aunque el unicornio árabe, si nos fiamos de las ilustraciones de sus manuscritos, a primera vista, era menos impresionante que el modelo occidental.

Durante la Edad Media simbolizó al propio Cristo, acaso porque, según cuenta la leyenda, solo una virgen podía acercarse a él. ¿Cómo se hizo posible que un símbolo tan pagano como el unicornio encarnase a Cristo?

Los bestiarios medievales combinaban conocimientos zoológicos (según el estado de los conocimientos de la época, en su mayoría tomados de fuentes antiguas) con interpretaciones religiosas. Por supuesto, Cristo está muy presente cuando se estudia la mitología del unicornio. La querencia cristiana al folclore y la mitología —según la cual, el tímido unicornio solo puede ser capturado con la ayuda de una virgen— permitió una interpretación con referencia a una escena primordial en la historia de la salvación: la Inmaculada Concepción. El unicornio (Jesús) es «atrapado» por la virgen (María), que está sentada en un hermoso jardín.

En el transcurrir histórico, la figura del unicornio vuelve a emerger simbolizando el amor cortés. ¿Esta simbología ha perdido peso hoy?

Basada en las interpretaciones religiosas del unicornio, la imaginación de una criatura muy difícil de domesticar se transfirió al amante en la poesía cortesana; aquí también aparece como objeto de anhelo: solo se pueden seguir sus huellas, nunca alcanzarlas. Esta idea de que la realización está en la distancia, es decir, en el hecho de que el objeto del deseo se nos escapa permanentemente, quizá se nos haya vuelto ajena hoy.

«Es fascinante cómo muchos de sus antiguos atributos, recogidos a lo largo de los siglos, aún conservan su valor»

La Edad Moderna arrinconó al unicornio hasta que volvió a ser «rescatado». La versatilidad del unicornio se muestra en que ha sido adoptado por el movimiento LGTBQ+, pero más como mascota que como símbolo. ¿Por su emblema de libertad?

El unicornio ha aparecido bajo muchos aspectos diferentes desde la antigüedad. Nuestra impresión es que el estatus moderno del unicornio como animal fantástico y mítico permite una enorme diversidad: unicornios delicados y regordetes, coloridos y de un blanco puro, con los colores del arcoíris y brillantes… hay muchas «modalidades» de unicornios poblando nuestra imaginación. Es imposible reducirlo a un solo significado (ni siquiera en la Edad Media), y eso sin duda contribuye al carisma del animal. Hoy es un símbolo de libertad, inconformismo y emblema del movimiento queer.

El que se hay integrado en la cultura pop, ¿ha acabado con su fuerza simbólica?

Al contrario, acaba de convertirse en hijo de su tiempo. Y es fascinante cómo muchos de sus antiguos atributos, recogidos a lo largo de los siglos, aún conservan su valor, aunque tal vez se sigan transformando.

¿Qué es lo que más les fascina a ustedes de esta «fascinación»?

Llevamos muchos años trabajando e investigando sobre este tema desde distintos ángulos: la historia cultural del unicornio desde la Antigüedad, las historias e imágenes que lo rodean y, sobre todo, el intento sistemático de probar científicamente su existencia.

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