Empresas verdes, empresas líderes

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Mauricio Hdez. Cervantes

@mauhercer1

En la larga carrera hacia la consolidación de las ciudades verdes que tanto anhelamos es necesario repensar la fórmula de nuestro modelo de consumo energético. El año 2030, fecha en la que las emisiones contaminantes deberán de ser menos de la mitad que hace cinco años, ya está en el horizonte.

La sostenibilidad y la circularidad ya no son ilusiones de una vida futura; ahora son la prueba misma de que la puesta en marcha de un nuevo modus vivendi más comprometido con el medio ambiente y con la creación de sociedades más limpias y autosuficientes ya se ha iniciado. Ser sostenible, en pocas palabras, no es una moda sino una realidad. Sin embargo, para vivir en un mundo más verde es necesario no solo repensar las maneras en las que consumimos la energía sino también darle una vuelta a cómo la producimos. 

La producción propia de energía garantiza bajos costos, independencia y autosuficiencia.

Ahora bien, para cumplir en tiempo los Objetivos de Desarrollo Sostenible, se necesita mucho más que el esfuerzo individual. Por supuesto que este es imprescindible, pero hay otros actores que también juegan un papel fundamental para lograr el «cambio verde», por ejemplo, la empresa. Y, más específicamente aún, las «empresas verdes» que ofrecen tecnologías necesarias para concretar ese cambio, que no es otra cosa que una etapa más del imparable proceso hacia una sostenibilidad global.

La ‘revolución verde’ desde dentro

¿Es posible formar parte de una compañía que produzca su propia energía? Sí, y ahora más que nunca. De cara al compromiso medioambiental internacional para evitar los irreversibles efectos del calentamiento global, cada vez es más fácil apostar por el autoconsumo. Es decir, generar in situ buena parte de la energía necesaria para el funcionamiento de la empresa con, por ejemplo, paneles fotovoltaicos, como así lo facilita Contigo Energía, la marca del grupo Gesternova a cargo de las instalaciones para el autoconsumo. 

En España, cada año el sector supera al anterior en número de instalaciones ejecutadas: en los últimos 5 años ha crecido en un 1200%. La producción propia de energía garantiza bajos costos, independencia y autosuficiencia. Y como la instalación se encuentra permanentemente conectada a la red, nunca se corta el suministro eléctrico.

Ahora bien, aún queda mucho camino por recorrer. En un documento elaborado por Bain junto al World Economic Forum, destacan que menos del 40% de las empresas, independientemente del sector, están cumpliendo con sus objetivos de sostenibilidad, incluyendo aquellos relacionados con el ahorro del agua, el aprovechamiento de residuos y la protección de la biodiversidad. 

Los grandes líderes empresariales del mundo pronostican para 2030 un aumento en el autoconsumo

Ser verdes al 100%

Una buena noticia para las empresas que decidan no esperar más para cumplir con sus compromisos de sostenibilidad es que, además de utilizar placas fotovoltaicas, pueden adoptar la propuesta de Gesternova y contar con energía limpia por las noches. Toda la electricidad que suministran es limpia, generada a través de fuentes de producción renovables e inagotables: instalaciones fotovoltaicas (sol), eólicas (viento), hidráulicas (agua) o biomasa (residuos orgánicos). De esta forma, quienes elijan el autoconsumo y adopten un consumo responsable por las noches aseguran su participación activa en la transición energética y el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible.

Otro de los puntos imprescindibles en la transformación de las empresas como entidades medioambientalmente responsables es el transporte. Contigo Energía, además, fomenta la movilidad sostenible ayudando a sus clientes con la instalación de puntos de recarga para aquellos que apuesten por los vehículos eléctricos. Lo claro aquí es que la sostenibilidad es y debe de ser integral, así como un incentivo para la maximización de los insumos de cada empresa.