Sociedad

Caminando hacia la recuperación sostenible

Junto con la recuperación económica, la sociedad parece demandar cada vez más cambios estructurales que dirijan nuestro país hacia el horizonte de la sostenibilidad.

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04
febrero
2022

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La maquinaria de la recuperación sostenible ya está en marcha: 140.000 millones de euros articulados bajo el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia serán su combustible. Las expectativas son muy altas bajo el interés de que pueda ser el acicate definitivo para provocar un cambio sistémico en nuestra economía, convirtiéndola en una más sostenible y, por supuesto, resiliente.

Desde mi posición como directora ejecutiva del Pacto Mundial de Naciones Unidas veo esa transformación cada vez más cercana. Después de muchos años trabajando en el ámbito de la sostenibilidad, por primera vez siento que todos los actores caminamos en la misma dirección. Los Estados están apostando firmemente por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a través de planes, estrategias y legislaciones que abogan por la limitación de las emisiones de CO2, la igualdad de género y los mecanismos de control con los que asegurar el cumplimiento de los derechos humanos. Asimismo, la palabra «sostenibilidad» también ha calado en el grueso de la sociedad, cada vez más consciente y preocupada sobre el cuidado del medio ambiente y los impactos de las compañías sobre la sociedad. El mercado financiero no se queda atrás: la inversión sostenible y responsable (ISR) volvió a crecer en 2020 de manera notable en nuestro país, hasta un 21%, según el último informe de Spainsif.

La palabra «sostenibilidad» ha calado en el grueso de una sociedad cada vez más consciente

Por su parte, las empresas también se mueven hacia esta inevitable tendencia del mercado. Nosotros lo vemos claramente a través de dos indicadores: mediante el número de entidades que se adhieren a nuestra iniciativa –en 2021 han sido un 20% más que en el ejercicio anterior– y a través de las conclusiones de nuestra publicación de referencia –Comunicando el Progreso 2021– en materia de análisis de la información no-financiera en las empresas de nuestro país. En esta se pone de relieve el firme compromiso de las empresas españolas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, siendo reportado por 32 de las 35 empresas del IBEX y por el 82% de nuestras entidades adheridas.

Datos muy positivos, pero que siguen siendo insuficientes para la magnitud de las metas que nos hemos marcado. Si queremos propiciar un cambio real del sistema tendremos que contar con todo el conjunto empresarial. En este sentido, al igual que hablo siempre de las oportunidades, me gustaría mencionar algunos retos que esta transición supone para las empresas, haciendo un llamamiento para que todos los actores, a través del trabajo en alianza, les ayudemos a enfrentarlos. Por un lado, la falta de recursos humanos especializados en la materia que identifiquen los impactos de la empresa en el desarrollo sostenible y elaboren planes específicos. Llevar a cabo proyectos en esta línea no es tarea baladí. Requiere de un conocimiento exhaustivo sobre el tema y la organización. El seguimiento y medición de los resultados alcanzados, así como la estandarización sobre cómo reportarlos, es otro de los mayores desafíos para las empresas de nuestro país.

El seguimiento y medición de los resultados alcanzados es otro de los mayores desafíos para las empresas de nuestro país

De manera generalizada, el trabajo en este ámbito se ha tratado de una forma aislada. Dar la importancia adecuada a los resultados y a la evaluación de las acciones presenta un significativo margen de mejora. Tanto las guías de integración de los ODS como la propia legislación en materia de información no-financiera y las demandas de los inversores, reclaman que este proceso se profesionalice. De hecho, contar con un estado de información no-financiera alineado con los principales estándares en la materia y los requisitos legislativos, es ahora un deber indispensable para todas las empresas de más de 250 trabajadores.

En este aspecto, en el Pacto Mundial de Naciones Unidas estamos trabajando en un nuevo proceso de reporting que cumpla estas exigencias con el objetivo de facilitar la labor a las entidades adheridas. Asimismo, contamos con programas de aceleración –y con formación y guías de integración– que les ayudan a establecer objetivos en las diferentes áreas de la sostenibilidad, como la representación de género (es decir, el ODS número 5) o la reducción de emisiones de CO2 (es decir, el ODS número 13).

En definitiva, trabajamos para guiar y ayudar a las empresas a superar estos retos. Es nuestra misión, pero también nuestra forma de aportar nuestro granito de arena a la reconstrucción sostenible. Porque si una cosa tenemos clara es que, si todos trabajamos para activar la palanca de la reconstrucción, un futuro mejor es posible.


Cristina Sánchez es directora ejecutiva de Pacto Mundial de Naciones Unidas España.

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