Liderazgo, colaboración y compromiso: claves para entender la RSE

Las empresas tienen un impacto en el entorno en el que operan, en los consumidores que pagan por sus productos y servicios y entre sus propios trabajadores. En una sociedad que cada vez demanda más pautas de comportamiento éticas y sostenibles, las compañías no pueden mantenerse al margen. Adquirir un compromiso firme con el entorno y con los derechos humanos es una obligación si quieren sobrevivir. La clave para el sector privado se llama Responsabilidad Social Empresarial (RSE).

«La sociedad en general ha cruzado una barrera fundamental para el futuro de las empresas, pasando de una mera consciencia sobre la necesidad de cuidar el entorno en lo ambiental y social, a un marco de exigencia en el que se reclama a las empresas un comportamiento responsable y con resultados», señala informe El papel del dirse en la nueva empresa, elaborado por la consultoría LLORENTE & CUENCA y la asociación DIRSE.  Una opinión que comparte Juan Pedro Galiano, subdirector de Responsabilidad Corporativa, Sostenibilidad y Marca de Adif, quien durante el último encuentro de Forética afirmó que «ahora ya no puede haber diferencia entre la RSE y la estrategia de la empresa».

Juan Pedro Galiano: «Ahora ya no puede haber diferencia entre la RSE y la estrategia de la empresa»

Con esta premisa como escenario, Forética, la asociación de empresas y profesionales líder en RSE, ha celebrado su sexto foro anual, CSR Spain 2018, para analizar las tendencias internacionales en responsabilidad y sostenibilidad. «Tenemos una oportunidad única para asociarnos con las demandas sociales que piden modelos de negocio inclusivos. Es una responsabilidad de todos, pero apelamos a los líderes empresariales para que mejoren su forma de gobierno y la transparencia en sus empresas con una política de cero corrupción», ha explicado Alberto Durán, presiente de Forética.

Durán, que inauguró el foro, ha recalcado la importancia del sector privado y ha pedido la colaboración institucional para lograr las metas en sostenibilidad. «Sin la contribución de las empresas algunos de los objetivos de desarrollo sostenible, como la creación de ciudades sostenibles o el uso de energías limpias, no serían posibles. Pero, sin duda, las compañías no pueden actuar solas, o, desde luego, es más difícil que lo hagan. Por eso, pedimos inteligencia y compromiso a los gobiernos». Cristina Gallach, alta comisionada para la Agenda 2030 ha asegurado a las entidades allí presentes que «tienen un socio y un apoyo: el Gobierno».

«La Agenda 2030 es un compromiso de país en el que la colaboración Estado-Empresa es imprescindible.  Necesitamos que todas las empresas de aquí sigáis trabajando y cumpláis con los objetivos con los que os habéis comprometido. Es necesaria una movilización y organización para realizar un trabajo preciso, detallado, incisivo y vigilante. Tenemos que ser capaces de hacer un monitoreo constante y ver si avanzamos en la buena dirección», ha dicho Gallach.

Gallach: «Si no conseguimos dejar un mundo mejor, habremos perdido lo más valioso que tenemos: el capital humano y el planeta»

Tras la exposición de las tendencias globales más relevantes en materia de sostenibilidad por parte de Filippo Veglio, director general del World Business Council for Sustainable Development, y Katja Bechtel, directora de Integridad Empresarial de Transparencia Internacional, ha comenzado el análisis de las tendencias internacionales en el contexto nacional. Begoña de Benito, directora de Relaciones Externas y RSC de Ecoembes, ha insistido en la importancia de la economía circular dentro de las empresas: «Europa está diciendo que es preciso cambiar de paradigma. Ya no nos dice que hay que cuidar el medio ambiente, lo que nos dice es que hay que integrarlo en todas nuestras tomas de decisión».

La jornada también ha recogido los principales retos en aspectos ambientales, sociales y de gobernanza de la mano de Juan Antonio Gómez-Pintado, presidente y CEO de Vía Célere; Chloe Chambraud, directora de Igualdad de Género de Business in the Community; Sari Brody, directora global de Igualdad, Diversidad e Inclusión del Grupo IKEA, y Antonio Cases, Legal, Public Affairs and CSR de CEMEX España.

En sus discursos han destacado la importancia del consumidor consciente, el rol empresarial del futuro del trabajo y el impulso que se está dando a la integración de los aspectos vinculados con la sostenibilidad desde la perspectiva de los inversores. «Si no conseguimos dejar un mundo mejor a las nuevas generaciones, habremos perdido lo mejor que tenemos: el capital humano y el planeta», ha concluido Cristina Gallach.