Invernalia sin salir de España

Aunque la Aemet advierte de que cada vez tendremos menos Invernalia y más Tropicalia, sigue ilusionando la experiencia de ver un manto blanco y sentir el crujido seco de cada paso y el silencio inmaculado que resulta tras una nevada. En España, el Pirineo aragonés y el catalán, la Cordillera Cantábrica, el Valle de Arán, las sierras de Gredos y de Guadarrama o Sierra Nevada permiten acercarse a esa fantasía blanca.

Como parte de la cordillera Penibética, Granada y Sierra Nevada gozan de más de un 80% de días de sol al año, lo que permite disfrutar de la nieve sin renunciar a los cielos despejados. Su estación de esquí –en funcionamiento desde 1964– ofrece con el mayor desnivel esquiable de todo el país. No es el único reclamo: entre sus 124 pistas se encuentra El Águila, que con sus 6,253 km es la de mayor longitud.

La estación de Sierra Nevada ofrece con el mayor desnivel esquiable de todo el país

Además de una tradición de décadas como punto para el esquí, la zona también cuenta con una larga historia hotelera. El Meliá Sierra Nevada fue, en 1972, el primer cuatro estrellas de la zona y una apuesta clara de la cadena por el turismo de nieve en España.

Cuatro décadas después, sigue ofreciendo tras un día de deporte al aire libre, cocina reconfortante y baños calientes y reparadores a pie de pista. El Meliá Sierra Nevada conserva el bucólico estilo de construcción alpina con madera, piedra y tonos cálidos típicos de los chalets de alta montaña, pero añade las exigencias del confort actuales. Toda el agua salada de su spa con vistas es generada por placas solares, más razón aún para un chapuzón descontracturante en medio del invierno.

Para saber más: melia.com y sierranevada.es