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Quién mueve los hilos de Europa

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31
enero
2023

Atrás quedan los tiempos en los que Alemania y su entonces canciller, Angela Merkel, marcaban el ritmo de Europa tras la crisis de 2008. Desde entonces, las cosas han cambiado mucho, especialmente en el «quién manda» en las políticas económicas de la UE: la hegemonía de Alemania sobre el resto de países está en entredicho y los 27 miran por primera vez a París antes que a Berlín.

Aunque por volumen, Alemania sigue siendo la principal economía, Francia está haciéndose con el liderazgo europeo. Álvaro Moreno Setién, periodista especializado en economía, apunta a tres principales motivos por los que Emmanuel Macron se está imponiendo a Olaf Scholz.

El liderazgo es el primer factor que señala el analista. La «era Merkel» –una dirigente muy asentada que llevaba casi 16 años gobernando– ha acabado y ha empezado la época de un Scholz por el momento poco robusto. Mientras tanto, Macron ha dado a Francia el primer liderazgo fuerte en años. «Por primera vez en mucho tiempo Alemania tiene un líder político más débil que Francia», resume el periodista de El Economista.

En este punto de transiciones de poder, Moreno destaca el nombramiento de Christine Lagarde como presidenta del Banco Central Europeo. La francesa tomó las riendas de la institución en los últimos años de Merkel y los primeros de Macron. «En este momento, con las subidas de tipos para controlar la inflación y las políticas monetarias en general, el Banco Central Europeo ha adquirido una importancia clave. Y aquí la influencia de Francia se nota», apunta.

El segundo punto es la cuestión energética, que lleva meses marcando todas las agendas políticas. «Alemania había basado su modelo energético casi a nivel fundacional en la importación de gas ruso barato», indica, llegando a tener una dependencia de los exsoviéticos del 55% a mediados de 2022. «Ahora Alemania está teniendo que hacer una transición a toda velocidad, mientras que Francia apostó por la nuclear, que supone aproximadamente el 70% de su energía», desarrolla el analista. Y suma: «Por ello, el plan francés ha salido reforzado, mientras que la economía alemana ha quedado sacudida por este cambio tan brusco».

«Alemania había basado su modelo energético casi a nivel fundacional en la importación de gas ruso barato»

Y la tercera clave para que Alemania haya quedado atrás es puramente económica. El periodista explica que los teutones están apagando fuegos en su economía «porque las sucesivas crisis que ha habido en el último año y medio le han afectado especialmente, lastrando su liderazgo económico». Los germanos viven principalmente de las exportaciones, que son aproximadamente el 40% de su PIB, «por lo que la crisis de suministros en 2021, una mayor inflación y una crisis energética y geopolítica como la de Ucrania, son letales porque dañan sus márgenes por el aumento de costes de los materiales y porque la demanda de sus productos puede caer». En contraposición, Francia tiene una menor dependencia del exterior, ya que solo el 20% de su PIB viene de exportaciones, «por lo que ha sufrido menos en ese sentido», concluye.

Como bonus track, el periodista económico añade que el Brexit está beneficiando a Francia: «Las inversiones que iban a Europa normalmente se dividían entre Frankfurt y Londres, especialmente acababan esta última ciudad. Pero ahora están concentrándose muchísimas inversiones extranjeras en París, una puerta a Europa sin las crisis de Alemania y con la seguridad jurídica que los ingleses perdieron con el Brexit».

A pesar de todo, el analista concluye que Alemania no está kaputt, aunque Francia haya ganado influencia. No debemos olvidar que sigue siendo el país industrialmente más potente de Europa, ni tampoco que la prima de riesgo de España se rige por la suya. Asimismo, ante la actitud combativa del pueblo francés, no se debe descartar que en algún momento acaben descabalgando a Macron «y esto vuelva a ser un festival de presidentes». Igualmente, se debe tener en cuenta la coyuntura mundial que causa la guerra en Ucrania. Por todo ello, Moreno «no daría por hecho que este cambio de paradigma de liderazgo económico va a ser permanente».

Mención especial a España

Aunque España ya no es aquel país recién salido de la crisis y despunta en el ámbito económico –como se acaba de destacar en el Foro de Davos–, sí hay algo en que lidera en toda la UE: la política energética.

Teresa Ribera lleva meses marcando la agenda del club de los 27 de cara al cambio a una Unión Europea más ecológica. La ministra predijo la subida de los precios del gas hace más de un año y ha sido una figura clave para paliar el aumento del coste de la energía para los hogares. Para los medios internacionales es la política «más visionaria» de Europa en el marco de la Agenda Verde.

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