Innovación

Nuevas tecnologías e inclusión social

El economista Jeffrey Sachs sostiene que «el teléfono móvil es el instrumento con mayor poder de transformación para el desarrollo». ¿Qué impacto tienen las TIC en los países en vías de desarrollo?

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05
abril
2013

«El teléfono móvil es el instrumento con mayor poder de transformación para el desarrollo». Esta afirmación del economista estadounidense Jeffrey Sachs es una de las premisas sobre las que pivota el estudio TIC, desarrollo y negocios inclusivos, realizado por la escuela de negocios Esade con la colaboración de la Fundación Telefónica.

Este estudio, que parte de la idea de que trabajar para dar respuesta a los retos de nuestra época sirve también como motor para la innovación tecnológica, recoge datos muy ilustrativos en torno al impacto positivo de las TIC. Según el Banco Mundial, por cada dólar invertido en telecomunicaciones se generan 6 gracias a su impacto en el empleo local y el crecimiento económico.

Su vertiginosa expansión ha convertido a la telefonía móvil en la tecnología más rápidamente adoptada de la historia. La GSM Association señala que en 2013 habrá 6.000 millones de suscriptores a la telefonía móvil y la mitad de estos usuarios serán de China e India.

En América Latina, a pesar de que en países como Brasil el equivalente al 62% de la población tiene móvil, el crecimiento es menos intenso porque la tarifas de telefonía móvil son menos asequibles para la población de bajos ingresos.

No obstante, el informe Oportunidades de la telefonía móvil en América Latina concluye que esta tecnología «es muy valorada por las personas en situación de pobreza como una herramienta para el fortalecimiento de los lazos sociales, así como para una mayor seguridad personal y para mejorar las oportunidades de negocio y empleo«.

El estudio de Esade y Fundación Telefónica insiste en que «las TIC, actualmente, se sitúan en la base de la mayoría de las actividades que constituyen el fenómeno de la inclusión social. El uso de las TIC está íntimamente ligado a lo que significa estar socialmente, económicamente, culturalmente y políticamente incluido en el siglo XXI».

Tal y como advirten desde Naciones Unidas, «las consecuencias que conlleva encontrarse en los márgenes del mundo tecnológico ya no se remiten únicamente al manejo de la tecnología, sino que afectan a la capacidad general del sujeto para interactuar con la sociedad, así como la de generar bienestar, satisfacción y una buena calidad de vida para sí misma y su familia».

De la teoría a la praxis

Durante la presentación del informe ,el director Reputación y Sostenibilidad Corporativas de Telefónica, Alberto Andreu, afirmó que “hay que desmontar mitos de la economía real y economía social para acercarlas y a través de las TIC puede haber un nexo de unión». “Las TIC están en el centro de la solución de los problemas sociales y la economía real”, añadió tras recordar  que “en cualquier proyecto de innovación social, el modelo del gobierno ha de ser similar al de la empresa».

La cooperación al desarrollo está asentada en gastos y no en inversiones, lo que tendría mayor impacto social», apuntó Andreu, para quien “cualquier brecha cultural, educación o de salud pueden erradicarse gracias a las TIC”.

En este sentido, Andreu llevó a cabo una clasificación de estas distintas brechas:

Brecha geográfica: Es la barrera que impide la extensión de las telecomunicaciones a las zonas rurales, debido al alto coste que conlleva establecer este servicio en estas zonas.

Brecha económica: Las diferencias de rentas entre las personas funcionan en ciertas regiones del planeta como barrera para su inclusión en el mundo de las telecomunicaciones.

Brecha educativa: Incluso cuando las Tecnologías de la Información y la Comunicación están disponibles, la falta de formación hace imposible utilizarlas.

Brecha salud y discapcidad. Las Tecnologías de la Información  y la Comunicación han demostrado poder mejorar la vida de la población con distintos tipos de enfermedades y son claves para la inclusión de las personas con discapacidad.

Brecha de gobernabilidad. En un mundo globalizado, las Tecnologías de la Información y la Comunicación son decisivas para la transformación de las relaciones con los ciudadanos,  las empresas y otros organismos.

[Descárgate el estudio a través de este enlace]

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