La eterna juventud (política) de los millennials
Atrapada por las crisis económicas, la generación está entrando en la mediana edad, pero no por ello cambiando sus afinidades políticas: siguen estando más escorados a la izquierda que sus padres.
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Entre las muchas frases que se atribuyen a Winston Churchill y se repiten de forma recurrente –aunque en realidad si la dijo o no es algo debatible–, está una que asegura que si cuando eres joven no eres de izquierdas «no tienes corazón», pero que si lo sigues siendo a los 35 «no tienes cerebro». La cita no está más que capturando un fenómeno habitual: la gente, a medida que envejece, se va haciendo más conservadora.
La ciencia dice que es por cómo impacta el paso de los años en la personalidad (se pierde curiosidad por lo nuevo) o en el modo en el que se establecen conclusiones, así como por el peso de la familiaridad con las cosas. Sea como sea, esta migración política se ha asentado como casi ley de vida. Tanto es así, que se emplea de forma habitual para explicar fenómenos –por ejemplo, por qué algunas comunidades autónomas votan más conservador que otras– y movimientos electorales. Se asume que, si tus votantes tienen ya sus años, es esperable que triunfen ciertas ideas.
Sin embargo, los millennials –nacidos entre los primeros años ochenta y mediados de los años noventa– podrían estar poniendo en tela de juicio este principio: puede que los años pasen por ellos –la capa alta del grupo demográfico ya está en «la mediana edad»–, pero no por eso se están haciendo más conservadores. Lo apunta en un tuit viral la economista Lucía Velasco, recurriendo a datos del Financial Times: «Parece que los millennials estamos rompiendo con la tradición de volverse conservador a medida que te haces mayor».
Los partidos conservadores tradicionales ya no tienen en el paso de los años un vivero natural de nuevos votantes
El diario económico lo concluye echando mano de los patrones de voto de Estados Unidos y Reino Unido: los partidos conservadores tradicionales no tienen en el paso de los años un vivero natural de nuevos votantes. En ambos países, los votantes de 35 años son 15 puntos menos conservadores que la media nacional (cuando a esa edad la tradición indica que deberían ser como mucho 5 puntos menos que la media). De hecho, incluso se van haciendo más de izquierdas en los años posteriores; es decir, la separación sigue ahondando a medida que se acercan a los 40.
Y aunque esto podría estar conectado con los propios hechos del momento (como la fatiga en Reino Unido ante los gobiernos conservadores), el análisis del FT apunta que es mucho más probable que se trate de una cuestión de cohorte demográfica. Es decir, que los millennials votan así porque son así: se convirtieron en votantes durante el estallido de la crisis económica de la primera década del siglo y eso los ha inclinado a la izquierda.
¿Es lo que ocurre en Reino Unido y Estados Unidos extrapolable a otras democracias occidentales? No exactamente, pero tampoco es que estos países sean una rareza sorprendente. En España, los datos del CIS muestran que los millennials se van haciendo más moderados en sus posiciones, pero no por eso más conservadores. Es decir, se acercan más al bipartidismo tradicional a medida que cumplen años, pero siguen estando más a la izquierda de lo que se daría por sentado. En 2019, de hecho, cuando se estaba en una fase de recuperación post-crisis, un estudio de la Fundación de Cajas de Ahorros concluyó que la mayoría de la generación se consideraba de izquierdas.
Por qué no se hacen de derechas los ‘millennials’
Las razones de este frenazo en este proceso tradicional están en la propia trayectoria vital de los millennials. Son la generación que se ha quedado atrapada entre dos crisis: la económica que siguió al crac de 2008 (y que frenó su entrada en el mercado laboral) y la que arrancó con la pandemia y que ha dominado estos últimos años (y a la que llegaron en la que era su última oportunidad para cumplir con los hitos de la entrada en la edad adulta antes de pasar a una siguiente fase vital).
Los ‘millennials’ cuentan con las «peores perspectivas económicas» de los últimos 60 años
Un reciente estudio de Oxfam Intermon y el Consejo de la Juventud de España los define –en su análisis entran también los Z– como «la generación de las tres crisis». Según sus cálculos, son quienes tienen «peores perspectivas económicas» en los últimos 60 años. Para los nacidos en los años sesenta o setenta, la renta per cápita crece de forma sostenida y está muy por encima de la generación anterior cuando cumplen 30 años. No ocurrió lo mismo para los nacidos en las generaciones posteriores: para los de los años ochenta, incluso cae en la comparativa cuando cumplen 27.
Y frente a la Generación Z, que aún está en su fase de juventud, la del Milenio se enfrenta a algo más moralmente agotador: las oportunidades de esos años juveniles no existieron por la Gran Recesión y ahora son demasiado mayores para competir con los nuevos jóvenes. Y a diferencia de los Z, como recuerda el politólogo Pablo Simón a La Sexta, ellos sí recuerdan tiempos mejores. «Recordemos que hubo un tiempo en España en el que la gente joven conseguía empleo de manera muy sencilla. Otras generaciones solo han conocido crisis», explica. Eso, sumado a su escala de valores –más feministas o más preocupados por los derechos LGTBI–, ayudaría a explicar por qué se escoran más a la izquierda de lo que lo estaban sus padres a sus mismas edades.
En cierto modo, esta es una generación desencantada. En los vídeos de humor que circulan por el feed de reels de Instagram, los millennials suelen ser pobres, sarcásticos y siempre víctimas de golpes inesperados que los hunden todavía más en la miseria. No es una casualidad.
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