Traspasando las fronteras del conocimiento

Identificar los mecanismos implicados en la destrucción de las proteínas; investigar la circulación atmosférica y el papel del vapor de agua en el cambio climático; descubrir el primer planeta extrasolar, trabajar para la erradicación de la viruela o renovar las posibilidades de la música vocal e instrumental. Éstas son algunas de las hazañas científicas y culturales merecedoras de los prestigiosos Premios Fronteras del Conocimiento BBVA.

«En un país donde estamos acostumbrados a que se pida y se espere del sector público la respuesta a todos los problemas, es especialmente gratificante registrar la colaboración de la sociedad civil no sólo en financiar el esfuerzo científico y artístico, sino también en reconocerlo y valorarlo«, afirmó el ministro de Ecucación, Ignacio Wert.

Cada uno de los premisados ha recibido 400.00 euros por su contribución a la sociedad. En esta edición 2012, han sido premiados  Alexander Varshavsky, por identificar los mecanismos implicados en la destrucción de las proteínas; Isaac Held, por sus descubrimientos sobre la circulación atmosférica y el papel del valor de agua en el cambio climático; y Michel Mayor y Didier Queloz por descubrir el primer exoplaneta.

Además, Ciro de Quadros, por su labor en la erradicación de la viruela; Angus Deaton, por su contribución a la teoría del consumo y del ahorro y a la medida del bienestar económico; Daniel Janzen, por desentrañar el funcionamiento de los ecosistemas tropicales; y Carver Mead, por hacer posible la construcción de los microchips con millones de componentes. Asimismo, Salvatore Sciarrino por renovar las posibilidades de la música vocal e instrumental.

Durante el acto el científico Carver Mead se dirigió a los innovadores, a quienes ha recordado que si fallan habrá otra oportunidad para el éxito, y Angus Deaton advirtió que la actual es una época en la que está amenazado no sólo el progreso económico sino las propias ideas de la Ilustración.

El presidente de BBVA, Francisco González, quiso lanzar un mensaje de optimismo. «Aunque la gravedad de los problemas a los que se enfrenta España puede llevar a pensar que nuestra economía, nuestra capacidad de investigar, innovar y crear riqueza están parados o, peor aún, en franco retroceso, se han llevado a cabo profundos cambios estructurales en las últimas décadas».