Siete ‘influencers’ que hablan de filosofía
Entre ‘reels’ de bailes, hay quienes han hallado en las redes sociales un modo de poner a pensar a miles de personas, muchas aún en ciernes como filósofas y filósofos.
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Los dedos de una mano sobran para enumerar referentes filosóficos de cierto impacto mediático de las últimas décadas. Si acaso, Fernando Savater y su La aventura del pensamiento sirvieron de introducción a los grandes filósofos. José Pablo Feinmann, desde Argentina, hizo de Filosofía aquí y ahora un programa casi de culto para algunos cafeteros. Y Eduard Punset, con su característica sonrisa, hablaba del alma humana en Redes, aunque lo suyo versara más sobre divulgación científica que de filosofía.
Ahora, ese panorama ha pegado un giro de 180 grados gracias a las redes sociales. La filosofía se ha escapado del programa de culto y se ha colado en TikTok, Instagram o YouTube. Ahora se discute sobre Nietzsche con su bigotudo rostro filtrado de colores, mientras uno se prepara unas tostadas escucha a alguien que habla de Foucault, y se reflexiona sobre el tiempo en vídeos de 30 segundos. ¿Superficial? A veces, es inevitable. ¿Útil para llegar al amplio público? No cabe duda. Entre reels de bailes, hay quienes han hallado en las redes sociales un modo de poner a pensar a miles de personas, muchas aún en ciernes como filósofas y filósofos. Aquí van siete nombres clave del panorama español.
Enric Gel
Enric Gel es el autor del canal Adictos a la filosofía, el cual cuenta con una cifra de seguidores que se aproxima al millón. En él, los vídeos se presentan como explicaciones breves de distintas temáticas filosóficas. Las exposiciones están adaptadas a cualquier paladar con un lenguaje llano y amable, y se entremezclan con memes, imágenes y demás vídeos secundarios.
El tono humorístico e irónico del canal torna, así, en un bálsamo no solo para estudiantes frustrados del bachillerato, sino también para toda persona que cobija alguna inquietud por conocer los principales problemas de la filosofía de una manera accesible.
Javier Santaolalla
Aun siendo físico de formación y conocido por sus vídeos sobre ciencia, Javier Santaolalla –quien cuenta con 2.5 millones de seguidores en Instagram– ha sabido trazar un puente entre la ciencia y la filosofía. Su «canal filosófico» más conocido, Por el amor de Higgs (disponible en YouTube o Spotify), brinda una serie de reflexiones centradas, especialmente, en el vínculo entre ciencia, filosofía y religión. El principal interés del canal estriba en su formato de diálogo, el cual combina la formación filosófica –y convicción religiosa– de Enric Gel con el enfoque científico del propio Santaolalla. El interés que ambos despiertan es incuestionable a la luz de que, por ejemplo, algunas de sus conversaciones en The Wild Project (de más de tres horas de duración) alcanzan la friolera de 3.7 millones de visualizaciones.
Algunas de las conversaciones entre Enric Gel y Javier Santaolalla alcanzan más de 3 millones de visualizaciones
En connivencia con los vídeos de divulgación científica, en su principal canal (Date un Vlog) se pueden encontrar asimismo contenidos a medio camino entre la filosofía y la física.
Paula Ducay e Inés García
Con miles de oyentes mensuales en Spotify, Punzadas Sonoras es un proyecto colectivo en el que la filosofía se entrelaza con problemas cotidianos. Sus episodios en formato podcast abordan temas tan variados como la soledad, la dependencia o el amor no correspondido.
Elaborado mano a mano entre las filósofas Paula Ducay e Inés García, el tono es reflexivo pero cercano. Sin miedo de presidir la mesa con la Metafísica de Aristóteles o los Fragmentos de un discurso amoroso de Barthes, el nombre del proyecto es acertado, pues cada episodio pincha pero, extrañamente, agrada.
Leo Espluga
Leo Espluga es uno de los creadores que más ha conseguido viralizar el pensamiento para los más jóvenes. En su perfil, la filosofía se marida con la literatura y la cultura pop con una naturalidad que llama la atención. Su estética, desde luego, no es la de un catedrático de traje y voz ronca. Su discurso tampoco. Y ahí, posiblemente, es en donde radica la proximidad que lo ha llevado a ser entrevistado en programas de máxima audiencia televisiva.
Ernesto Castro
Ernesto Castro es una figura clave en la filosofía digital española. Su canal de YouTube, con más de 100 mil suscriptores, ofrece clases y monólogos de horas de duración sin cortes ni adornos. En ellos habla de Marx, Heidegger, estética, trap o feminismo con un estilo frontal, sin filtros.
A diferencia de otros divulgadores, Castro rechazó los formatos breves, el lenguaje indulgente con el público más lego y, en cierta medida, también la corrección política. Su presencia en redes fue intensa y polémica, lo que le generó seguidores fieles y un puñado de haters. Finalmente, decidió cerrar sus cuentas y esfumarse del espacio digital.
Ayme Román
Ayme Román es una de las voces más radicales y potentes en la intersección entre la divulgación filosófica y el feminismo. Decenas de miles de seguidores de sus cuentas de Instagram, TikTok, Youtube o X siguen cada jornada su contenido. Más allá de un sinfín de aclaraciones conceptuales sobre términos tan cotidianos como espinosos, Román ha protagonizado distintos debates y entrevistas en medios generalistas.
Con ella, una vez más, la filosofía ha salido de la academia para adentrarse, subrepticia, en todo tipo de hogares. Todo lo cual, en suma, conduce al corolario de que nunca ha sido tan fácil encontrar información filosófica apta para cualquier persona, sea cual sea su bagaje educativo.
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