El diálogo para la transformación social
Redeia celebró su primer Encuentro de Impacto, una cita pensada para ofrecer una visión amplia de los proyectos que impulsa en el ámbito social, ambiental y territorial, y para mostrar sus efectos positivos en comunidades de toda España, favoreciendo al mismo tiempo un espacio natural para el intercambio de impresiones y experiencias entre quienes los hacen posibles.
Artículo
Si quieres apoyar el periodismo de calidad y comprometido puedes hacerte socio de Ethic y recibir en tu casa los 4 números en papel que editamos al año a partir de una cuota mínima de 30 euros, (IVA y gastos de envío a ESPAÑA incluidos).
COLABORA
Artículo
Las empresas no son entes que actúan en dimensiones al margen del mundo, sino que conviven con la vida cotidiana de las personas. Ese papel —omnipresente— es al que estamos acostumbrados y, de alguna forma, hace que todo a nuestro alrededor avance, crezca y funcione. Y ahora ese rol está cambiando. El verdadero diferencial en la vida social surge cuando la empresa se acerca al plano de los ciudadanos y busca conversar, comprender y responder a las verdaderas necesidades de la comunidad. El valor de convertir el desarrollo empresarial en un verdadero diálogo fue el tema central del Encuentro de Impacto de Redeia, organizado en colaboración con Ethic.
«Las compañías tenemos la responsabilidad de dejar las cosas mejor de como las encontramos». Con esta declaración de intenciones comenzó su intervención Beatriz Corredor, presidenta de Redeia, quien, en una conversación con Pablo Blázquez, fundador de Ethic, destacó la importancia de que las empresas se acerquen a los territorios y, desde ellos, a las personas que los habitan. «Me emociona poner nombre a proyectos que en el despacho se quedan en meras cifras, pero que cuando se ponen en marcha tienen un poder verdaderamente transformador sobre la vida de las personas», contó Corredor. Estos impactos son especialmente relevantes en una compañía como Redeia, cuya misión es garantizar que el suministro eléctrico y la conectividad lleguen a todos los puntos de España en igualdad de condiciones.
Beatriz Corredor: «Las compañías tenemos la responsabilidad de dejar las cosas mejor de como las encontramos»
Hablar con el territorio
Hace unos años, Redeia decidió rediseñar su relación con los lugares adonde llega. Para Corredor solo existe un modo: «Hay que ir al territorio y preguntarle a la gente: ¿cómo podemos hacerlo mejor?». Gracias a ese planteamiento, en 2021 el ambicioso y estratégico proyecto de interconexión de la península con Ceuta cambió de forma radical. Lo que inicialmente iba a ser una subestación en las proximidades de La Línea de la Concepción se convirtió, gracias al diálogo activo con las partes interesadas, en «una propuesta alternativa innovadora, con soluciones marinas y subterráneas muy avanzadas y con mucho menor impacto ambiental, en la que no se ve ni un solo cable ni una sola torre», explicó Corredor. La nueva intervención era más costosa, «pero para nosotros la rentabilidad económica no se entiende sin la rentabilidad social. El impacto positivo es eso: tiene que ganar la empresa, por supuesto, pero eso solo se consigue si la sociedad gana también», señaló la presidenta de Redeia.
Aquel «proyecto cero» fue el germen para que en 2023 Redeia pusiera en marcha una innovadora estrategia de sostenibilidad: la Estrategia de Impacto Integral. El plan se vertebra sobre tres ejes —económico, ambiental y social— y busca integrar transversalmente la protección de los ecosistemas y la biodiversidad, la integración paisajística de sus instalaciones, el respeto al patrimonio cultural material e inmaterial, la lucha contra el cambio climático, la economía circular y la reducción de desigualdades.
Todo el sistema se apoya en un método de reporte que mide el impacto positivo de las diversas acciones y controla su ejecución, verificando miles de datos sobre sostenibilidad. Un entramado, resume Corredor, de «inteligencia colectiva» del que «surge la magia». Hasta la fecha, la Estrategia de Impacto Integral de Redeia ha puesto en marcha 240 iniciativas a las que ha destinado 17,5 millones de euros. «Cuando escuchas e incorporas las necesidades del territorio, todos ganan. Algunos de nuestros proyectos llevaban años parados por oposición social y se han desbloqueado gracias a este enfoque de diálogo e impacto», insistió la presidenta.
Acciones para cambiar vidas
Diez de esas iniciativas han sido recogidas ahora en Red Activa, una plataforma web destinada a difundir historias reales —con nombres y apellidos— de proyectos que ya están en marcha y están logrando un impacto en el territorio. Algunos de los protagonistas estuvieron presentes en el evento de Redeia y fueron testimonio vivo de que otro tipo de convivencia entre empresas y territorio es posible.
Desde la perspectiva ambiental, Redeia está impulsando propuestas como Bosque Marino, centrada en la restauración y conservación de ecosistemas marinos, o la reinserción del quebrantahuesos en los Picos de Europa, su hábitat natural.
La Estrategia de Impacto Integral de Redeia ha puesto en marcha 240 iniciativas con una inversión total de 17,5 millones de euros
Rosana Álvarez, joven ganadera leonesa, es una de las protagonistas de esta transformación. Es una de los 400 ganaderos que participan en Pastoreo en Red, una iniciativa que «a través de la ganadería extensiva permite que el terreno esté limpio 365 días al año, lo que además de prevenir incendios de forma natural, es muy positivo para la biodiversidad», destacó. Para Rosana, Pastoreo en Red es un ejemplo de actuación que «mejora los ecosistemas y, al mismo tiempo, juega un papel determinante en la lucha contra la despoblación rural».
La estrategia también tiene una dimensión social destacada. Como recordó Corredor, «en la ‘s’ de social están las políticas de igualdad, inclusión y diversidad. Y es imprescindible que en la transición energética en la que estamos inmersos nadie se quede atrás». Una de las propuestas de referencia es Holapueblo, que ayuda a pequeños municipios con problemas de despoblación a ganar habitantes. Hasta la fecha, 208 «holapueblers» ya han logrado cambiar de vida gracias a un trabajo preciso de acompañamiento e intermediación.
Otra de esas iniciativas que cambian vidas se centra en la igualdad de oportunidades en la diversidad. La escuela de Surf Peña Txuri, en la localidad vizcaína de Sopelana, ha desarrollado un programa de surf adaptado e inclusivo para personas con necesidades especiales. «Creímos que teníamos la obligación empresarial, moral y social de apoyar y ayudar a las personas con capacidades diversas a disfrutar de la vida», explicó Naroa Saratxaga, gerente de Peña Txuri Surf Eskola. El programa ha ganado impulso gracias al apoyo de Redeia y actualmente ofrece cursos inclusivos durante todo el año.






COMENTARIOS