Por un mercado laboral más inclusivo
A pesar del récord de ocupación en España, el mercado laboral sigue dejando fuera a algunos sectores de la población. Las personas con discapacidad son uno de los segmentos con más dificultades de acceso, especialmente si son jóvenes que buscan su primer empleo, personas mayores de 50 años o mujeres en riesgo de exclusión.
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Las últimas estadísticas de empleo invitan al optimismo: los números de ocupación están entre los más altos de la historia reciente y la tasa de paro del primer trimestre de 2024 es la más baja de toda la serie histórica. Pero ¿se puede hablar de una buena salud del mercado laboral cuando una parte de la población sigue quedándose fuera casi de manera sistemática?
Las cifras demuestran que no es una cuestión superada: todavía se debe trabajar intensamente. Como apunta el análisis 8 retos y 25 metas de futuro para el mercado laboral, elaborado por la Fundación Adecco, España todavía mantiene tasas de desempleo por encima de la media europea y deja fuera del mercado laboral a numerosas personas con discapacidad y otras en riesgo de exclusión. El elevado desempleo es un condicionante que no solo dispara las cifras de exclusión y desigualdad, sino que merma la competitividad global del país. Combatirlo exige la acción coordinada de todos los agentes sociales, así como políticas activas de empleo que incrementen la cualificación de la fuerza laboral. Además, es imprescindible garantizar la protección legal de las personas trabajadoras, haciendo frente a la economía sumergida o invertir en sectores emergentes de alto valor añadido.
La tasa de actividad de las personas con discapacidad es todavía 42,7 puntos inferior a la media general
En el caso concreto de las personas con discapacidad, resulta esencial promover su participación laboral, ya que algunas llegan a tirar la toalla incluso antes de empezar (actualmente solo el 35% de quienes están en edad laboral tiene empleo o lo busca), incrementar su presencia en las empresas ordinarias (el 70% trabaja en entornos protegidos) o garantizar que aquellas personas con discapacidad intelectual o psicosocial, habitualmente excluidas de los procesos de selección tradicionales, tengan oportunidades reales de empleo. Se trata de retos históricos y estructurales, ya que, como recuerda el Libro blanco sobre empleo y discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, las personas con discapacidad no lograban una buena inserción antes de la crisis de 2008.
Y esta realidad no solo afecta a las personas con discapacidad. Las empresas también pierden talento, perspectiva y riqueza humana. Por su parte, las personas con discapacidad «en muchas ocasiones no saben cómo empezar o se encuentran en situación de bloqueo psicológico o emocional», explica Begoña Bravo, directora de Inclusión de la Fundación Adecco. «Tenemos que sacarlas de esa situación y conectarlas con un mercado laboral que, en muchas ocasiones, les sobrepasa», indica.
Crear un mercado laboral más inclusivo requiere trabajo y la implicación de todos los agentes sociales. Es necesario dotar a las personas de herramientas para conectar con el mercado laboral —Bravo habla, por ejemplo, de competencias digitales o habilidades de comunicación—, pero también asentar una visión renovada en el mundo corporativo. Y no menos importante resulta establecer puntos de encuentro que logren que esas barreras se hagan franqueables.
En este contexto, el Grupo Adecco y su Fundación han habilitado «la Ruta del Empleo», un autobús itinerante que inició su ruta en abril y recorrerá varias ciudades españolas para ofrecer asesoramiento laboral a los demandantes de empleo, especialmente a aquellos que lo tienen más difícil, como las personas con discapacidad. Bajo la consigna «¿Buscas trabajo? Te ayudamos», la iniciativa conmemora su 25 aniversario y espera atender a unas 12.000 personas. «Este autobús simboliza nuestra ruta a la inclusión, un camino que iniciamos hace 25 años y que a veces es muy exigente y repleto de desafíos, pero que sin duda merece la pena», sintetiza su presidente, Enrique Sánchez.
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