El poder catalizador de las tecnológicas

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Carmen Gómez-Cotta

@GomezCotta

Cuando Dmytrii llegó a España desde su Ucrania natal, estaba solo. Aterrizó en Barcelona como refugiado, sin amigos, familia ni trabajo y sin conocer la ciudad ni el idioma. Pero enseguida entró en contacto con la Fundación Altius, entidad social sin ánimo de lucro que promueve la inserción sociolaboral de los colectivos más vulnerables, y su suerte cambió: «Ahora tengo un profesor de español y un trabajo», cuenta desde uno de los Solidary Delivery Center de Glovo, donde trabaja como picker.

El caso de Dmytrii es un ejemplo de las iniciativas que generan un impacto positivo y contribuyen a mejorar las sociedades en las que vivimos. Con esta idea en mente surge La huella del cambio, un proyecto editorial de Glovo desarrollado en colaboración con Ethic, donde se recogen las iniciativas sociales y medioambientales con más impacto que la empresa tecnológica está llevando a cabo.

Muchas pymes han encontrado en Glovo un aliado para ser más competitivas

La digitalización es un catalizador para la innovación y el crecimiento, especialmente para las pequeñas y medianas empresas. En un mundo globalizado, donde imperan los márgenes reducidos para todo aquel que no sea un gigante del comercio electrónico o una gran superficie, muchas pymes (restaurantes y tiendas) han encontrado en Glovo un aliado que les permite hacer uso de todo un set de herramientas digitales con las que tener presencia online, llegar a más público y aumentar sus ventas. En definitiva, ser más competitivas.

Apoyar a las ONG en la digitalización y la recaudación de fondos (Give) o hacer crecer económicamente su ecosistema (Grow) son dos de las áreas de actuación de Glovo, que usa la tecnología como motor de cambio para dejar esa huella positiva. La tercera es invertir en la conservación del medio ambiente para reducir el impacto ambiental del entorno en el que operan (Green). Por eso emprendieron, junto con la Fundación Tierra Pura, una iniciativa que permitirá regenerar los ecosistemas autóctonos en una zona que sufrió uno de los incendios más grandes de la historia de Galicia gracias, sobre todo, al apoyo activo de las comunidades locales. «Nuestro objetivo principal es invertir en los países en los que estamos presentes, ya que creemos que el impacto ha de ser local para que pueda actuar sobre problemas concretos, tanto ambientales como sociales, de esa ciudad o territorio», explica Sébastien Pellion, Global Head of Impact & Sustainability de Glovo.

Las tecnológicas tienen un poder catalizador importante y ahora, además, un gran objetivo: realizar inversiones con impacto con las que activar la huella del cambio.