Agua

Mapa medioambiental de los ríos de España

La sequía que atraviesa España está en la cumbre de la agenda mediática, pero hay otros problemas de fondo que contribuyen a la poca disponibilidad y a la salud de nuestras redes hídricas. En este artículo analizamos los principales desafíos de la salud medioambiental los ríos españoles.

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27
febrero
2024
El río Manzanares a su paso por Madrid.

En los últimos meses, la sequía es portada en todos los medios de comunicación, y es ciertamente uno de los problemas más grandes que enfrenta España en los últimos años. Regiones como Andalucía y Cataluña han estado (y están) gravemente afectadas por largos períodos sin lluvias, y ahora muchos alertan sobre una de las recesiones hídricas más grandes de la historia reciente. Sin embargo, si bien la sequía es la gran preocupación, existen otros factores que contribuyen a la degradación de nuestros ecosistemas, como la contaminación de los ríos, el poco cuidado con nuestros recursos naturales y reservas de agua o la extracción intensiva de agua en algunas zonas que han causado movimientos en la tierra y una pérdida de biodiversidad importante.

Los ríos son unos de los grandes castigados por esta regresión y presentan datos que deberían ser motivo de gran alerta. Por ejemplo, un estudio de la revista Philosophical Transactions of the Royal Society B, editado por el grupo de investigación Freshwater Ecology, Hydrology and Management (FEHM-UB) y del Instituto del Agua de la Universidad de Barcelona (IdRA), con la colaboración de científicos invitados como Ben Kefford (Universidad de Canberra, Australia) y Ralf B. Schäfer (Universidad de Koblenz-Landau, Alemania), llegó a la conclusión de que un tercio de los sistemas fluviales en España presentan un exceso de sales en su composición, que genera altos impactos medioambientales no solamente para la salud de los ecosistemas (como cambios en el paisaje o alteraciones en la fauna del lugar), sino también para la supervivencia humana y los potenciales usos económicos del agua. Sin embargo, el grupo destacaba la falta de directivas de regulación respecto a este problema, así como la necesidad de limitar el nivel de iones en las aguas, objetivo que solamente se puede lograr con la colaboración de todos los actores.

Un estudio de la Universidad de Nueva York señaló que el río Manzanares era el más contaminado de la región europea

Así mismo, un estudio llamado Pharmaceutical pollution of the world’s rivers, elaborado por científicos de la Universidad de Nueva York, demostró que después de analizar 258 ríos en más de 1.000 lugares en 104 países del mundo, el río Manzanares era el más contaminado de la región europea. Si bien el clima árido de la Comunidad de Madrid tenía mucho que ver en el estado de sus aguas, la contaminación y presencia de fármacos en el río lo convertían en destacado por su mal estado. Así, la calidad del agua de los ríos en España es altamente variada, con algunos como el Tajo y el Duero mostrando mejoras, mientras que otros como el Guadalquivir y el Ebro enfrentan desafíos de contaminación debido a actividades agrícolas e industriales.

Otro estudio realizado por el Ministerio para la Transición Ecológica en 2021 mostraba que casi un 30% de los puntos de seguimiento de aguas superficiales presentaba concentraciones de plaguicidas por encima de la norma de la calidad ambiental. Como apunta el proyecto Life Renaturwat, un proyecto centrado en producir agua de calidad con residuos y soluciones naturales para uso en la conservación de humedales: «La disminución de los caudales ecológicos, agravada por sequías y sobreexplotación, junto con la fragmentación del hábitat por obstáculos como presas, y la reducción de nutrientes en aguas residuales son aspectos críticos para prevenir la eutrofización de los cuerpos de agua».

Un 30% de las aguas superficiales de los ríos españoles presenta concentraciones de plaguicidas por encima de la norma de la calidad ambiental

Una de las soluciones que puso en marcha el Gobierno fue la creación de un Observatorio Ibérico Fluvial, compuesto por más de 50 investigadores y técnicos coordinados desde la Estación Biológica de Doñana (EBD) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Si bien este hecho fue un gran hito en un momento en el que la salud de las reservas hídricas estaba en un punto crítico, no es una solución suficiente para mejorar la salud medioambiental de los ríos. El sector económico tecnológico creciente llamado Cleantech se ha desarrollado en los últimos años para paliar o reducir los efectos negativos del cambio climático. En el sector del agua y en España se cuentan más de 750 startups en este campo según datos de Ecosistema Startup. Impulsar este sector podría ser una de las soluciones más adecuadas de la mano de nuevas regulaciones de control de suelos y aguas para revertir los efectos negativos de la polución de los ríos, aunque para conseguir un mapa medioambiental de los ríos en España mucho más sostenible, resiliente y saludable hará falta mucho más. Y mucha menos contaminación.

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