El proyecto Mares Circulares rescata 584 toneladas de residuos de los océanos

El mar se ha convertido en nuestro gran vertedero. Cada día aparecen en las costas de todo el mundo toneladas de residuos generados por las actividades humanas. Tirar una colilla en una alcantarilla o un bastoncillo sanitario por el inodoro son acciones aparentemente insignificantes pero que, en su mayoría, se suman a esos más de 900.000 kilos de basura que cada hora aterrizan en los océanos, de los cuales el 70% se acumulan en el fondo.

Si bien urgen cambios drásticos en nuestro modelo de producción y consumo, así como la adopción de hábitos sostenibles en nuestro día a día, la solución más inminente pasa por recuperar (y reciclar) todos aquellos residuos que ahora mismo navegan por los océanos. Bajo esta idea, el pasado 2018 Coca-Cola anunció su estrategia global World Without Waste (Un mundo sin residuos) con la meta de que, para 2030, se recojan y reciclen el 100% de los envases comercializados. En España la compañía puso en marcha Mares Circulares, una iniciativa orientada a limpiar las playas y los fondos marinos de envases. Un año después de su nacimiento, los datos ratifican el impacto positivo que ha generado en el medio ambiente.

«Coca-Cola reciclará el 100% de sus envases para 2030»

En total se han recogido 584 toneladas de residuos, de las cuales dos toneladas corresponden a envases compuestos por plástico PET. Para Ana Gascón, directora de Responsabilidad Corporativa de Coca-Cola Iberia, alcanzar este resultado ha sido posible gracias a que en Mares Circulares «se han involucrado todos los agentes implicados en la sostenibilidad ambiental de los entornos marinos». Diversas asociaciones y la administración pública se han comprometido con tres líneas de actuación: la retirada de residuos, la sensibilización y la promoción del modelo de economía circular.

Las campañas de recogida de residuos, que se han llevado a cabo en 82 playas, diez espacios naturales y diversos fondos marinos de España y Portugal, han contado con la participación de más de 5.000 voluntarios. Entre ellos se encuentran casi 1.000 niños, que amparados bajo el paraguas de la fundación Ecomar, han logrado retirar dos toneladas de residuos. Pero no solo se trata de acciones puntuales. A ojos de la fundadora de Ecomar, Theresa Zabell: «Hay que educar para no contaminar desde el origen».

En esta línea, el proyecto ha promovido también campañas de sensibilización y formación tanto de jóvenes como de pescadores gracias a la labor de la Asociación Chelonia y de Vertidos Cero. «Los residuos deben convertirse en productos que puedan volver a entrar en el mercado». De esta manera, la directora de Vertidos Cero, Estíbaliz López-Samaniego, destaca la importancia del último plano de actuación de Mares Circulares: la economía circular.