3.000 horas de voluntariado corporativo en un solo día

El sector privado es cada vez más consciente de que puede generar beneficios sociales y medioambientales si hace un buen uso de sus recursos -esto es, su capacidad económica- así como de las aptitudes de los trabajadores a través de labores de voluntariado. «Una correcta política de voluntariado corporativo lleva consigo la consecución de ventajas para los tres agentes implicados en el proceso: el colectivo beneficiario, las empresas y los voluntarios (empleados). Una adecuada implantación aporta beneficios claros a la sociedad, pero también resulta muy rentable para la empresa, a la luz de los beneficios que se obtienen», explica el Observatorio de Voluntariado Corporativo.

Consciente de estos beneficios, Lilly organiza cada año el Día del Voluntariado, actividad que realiza de forma simultánea en todo el mundo. El pasado jueves 27 de septiembre, la compañía farmacéutica celebró la undécima edición del Día del Voluntariado con la participación de más de 600 empleados en 17 ciudades españolas. «Los voluntarios han dedicado casi toda la jornada a actividades centradas en la normalización de la discapacidad, humanización de un hospital, cuidado del medio ambiente y de tareas en un centro para la recuperación de la fauna salvaje autóctona; así como al acompañamiento a personas mayores, convivencia para favorecer la inclusión de colectivos desfavorecidos y el apoyo al emprendimiento social», explican desde Lilly.

La edición de este año ha contado con un aumento de alrededor de 100 participantes respecto al Día del Voluntariado de 2017, lo que ha permitido a Lilly incrementar el número de horas dedicadas a las diferentes actividades hasta superar las 3.000 horas de trabajo para la comunidad. «Nos enorgullece comprobar que, año tras año, un importante número de empleados responde con mayor pasión en este Día del Voluntariado, demostrando su vocación de ayuda y su faceta solidaria», ha indicado Nabil Daoud, presidente de Lilly España.

Durante el Día del Voluntariado 2017 se han organizado un total de 32 actividades diferentes con entidades que trabajan en la recuperación del ambiente como Reforesta, la normalización de la discapacidad como Fundación Síndrome de Down Madrid o la Asociación para personas con Síndrome de Down en Murcia (ASSIDO), o en la rehabilitación de especies animales autóctonas, como es el caso de GREFA.

Asimismo, también han recibido la ayuda de los empleados de Lilly la Fundación Pequeño Deseo, con quienes los empleados de Lilly han colaborado en decorar el pasillo de Urgencias del Hospital 12 de Octubre en Madrid «para hacer más amigable la estancia de los pacientes» y otras entidades que centran su actividad en la lucha contra la exclusión social, como es el caso de United Way, el Banco de Alimentos o las asociaciones Vida Digna (Vigo) y Madre Coraje (Granada) y organizaciones dedicadas a la atención de las personas mayores (DomusVi y Amavir).

Por último, varios empleados voluntarios de Lilly han participado en una actividad de apoyo al emprendimiento social en colaboración con UnLtd Spain, entidad que ofrece ayuda a emprendedores a través de programas de apoyo y mentoría. En la actividad desarrollada durante el Día del Voluntariado, los empleados han prestado su colaboración y experiencia a los emprendedores de Social & Care, quienes han desarrollado una app que ayuda a familiares y cuidadores de personas con Alzheimer, Parkinson o movilidad reducida a saber dónde están en todo momento.

Además de las actividades llevadas a cabo en Madrid, donde Lilly tiene su sede, los empleados de Lilly con domicilio en otras ciudades españolas han podido participar en actividades que se han desarrollado en las ciudades de Málaga, Cádiz, Sevilla, Granada, Zaragoza, Palma de Mallorca, Barcelona, Alicante, Valencia, Bilbao, Murcia, Tenerife, Vigo, A Coruña, Valdepeñas y Valladolid.