Cuando la salud no tiene fronteras

El shock pandémico, el avance de la crisis medioambiental o la tensión geopolítica parecen haber instaurado en los países occidentales cierto clima de alerta ante lo que se percibe como una época de inestabilidad e incluso emergencia constante. Sin embargo, basta alejar el zoom un poco para darnos cuenta de que, pese a que no conviene obviar las amenazas que nos acechan de cerca, lo cierto es que seguimos gozando de un sofisticado Estado de Bienestar que amortigua y reduce a molestias del día a día muchos potenciales problemas que, en otras sociedades y contextos, podrían suponer verdaderas tragedias. Especialmente, en lo que respecta al acceso a la salud.

Siguiendo la máxima de no dejar a nadie atrás en aquellos lugares en los que más ayuda se necesita –y menos a menudo copan los titulares–, el Consejo General de Colegios Farmacéuticos ha vuelto a entregar, en su vigésimo cuarta edición, sus Ayudas a proyectos de cooperación al desarrollo. Con una dotación inicial de 30.000 euros, dichas ayudas tienen como objetivo apoyar la ejecución, en este caso, de cinco proyectos solidarios que favorecen el desarrollo de los pueblos y contribuyen a paliar las necesidades de las comunidades más vulnerables y pobres de los países en vías de desarrollo, favoreciendo su progreso social, sanitario y económico.

Nieves Mijimolle (Farmaundi): «Con el apoyo del Consejo y junto a nuestra contraparte local facilitaremos el acceso a tratamientos a más de 5.000 personas»

De acuerdo con Cristina Tiemblo, tesorera del Consejo General de Colegios Farmacéuticos «con esta convocatoria, fomentamos esa aportación que hacemos cada día al ODS 3, garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades. Como farmacéuticos, como profesionales sanitarios, trabajamos sin descanso para favorecer el acceso a los medicamentos y tratamientos, y fortalecer la capacidad y calidad asistencial de los sistemas sanitarios».

Junto a Cristina, han intervenido en la rueda de prensa en la que se presentaron los proyectos beneficiarios Nieves Mijimolle, vocal y delegada de Madrid de Farmamundi; Xavier Medina, secretario de Fundación El Alto; Mª Ángeles de la Torre, presidenta de Farmacéuticos en Acción; Javier Adsara Grau, director y secretario general de la Fundación Nuestros Pequeños Hermanos; y Emilio Sastre Huerta, presidente de la Fundación Hospital Mayo Rey.

Proyectos beneficiarios

El proyecto de Farmamundi Fortalecimiento de la Red DISOME a través de la Atención Primaria en Salud y Salud Sexual y Reproductiva (en el municipio Santo Domingo Norte) ha sido dotado con 15.000 euros.  Sobre el proyecto, Nieves Mijimolle ha comentado que «con el apoyo del Consejo y junto a nuestra contraparte local, la Institución Social Colectivo de Salud Popular (COSALUP), suministraremos kits de medicamentos esenciales y anticonceptivos a diez botiquines comunitarios de la Red, con lo que facilitaremos el acceso a tratamientos a más de 5.000 personas que viven en el distrito. También daremos formación a mujeres, jóvenes y adolescentes en derechos sexuales y reproductivos, prevención de embarazos no deseados y prevención de violencia de género, que ayuden a empoderarlas y les den recursos para la movilización».

Contribuir al derecho a la salud mediante la capacitación técnica y la mejora en los servicios de farmacia hospitalaria en el Hospital Saint Joseph en Bébédjia en Chad, de Fundación El Alto y dotado con 9.000 euros, es el segundo de los proyectos beneficiarios. Xavier Medina ha señalado que «llevamos desde 2010 trabajando en la implantación de un servicio de farmacia de calidad que resuelva los problemas de gestión de recursos que actualmente le afectan. Concretamente, queremos fortalecer el sistema de stock de medicamentos, potenciar la formulación magistral y mejorar las capacidades técnicas y especializadas del personal. Objetivos que parten de uno de los pilares de la Fundación El Alto, que es garantizar la continuidad de los proyectos sin intervención del exterior».

Mª Ángeles de la Torre (Farmacéuticos en Acción): «Se trabajará principalmente con niños de entre 0 y 5 años, facilitándoles suplementos de leche y cereales»

Dotados ambos con 3.000 euros han sido los proyectos Nutrición Infantil, Asistencia y Promoción Sanitaria en Abomey (Benín), de Farmacéuticos en Acción, y  Garantizar el medicamento a los niños enfermos y heridos en una situación de guerra civil, desde la farmacia del hospital St. Damien (Haití), de la Fundación Nuestros Pequeños Hermanos.

En relación con el primero, Mª Ángeles de la Torre ha indicado que su proyecto tiene como objetivo promover la salud y la educación de la población en general, y de los niños en particular, a través de una asistencia sanitaria de calidad y accesible prestada por el Dispensario de las Religiosas de la Asunción, en Abomey, en el que se efectúan unas 8.000 consultas anuales y 140 dispensaciones semanales. «Se trabajará principalmente con niños de entre 0 y 5 años, facilitándoles suplementos de leche y cereales, e impartiendo formación a las madres de cómo alimentar a sus hijos».

Por su parte, Javier Adsara Grau ha afirmado que «en Haití, solo uno de cada 10.000 ciudadanos tiene acceso a la salud, por la falta de estructuras sanitarias, medicamentos y profesionales. En medio de una situación de guerra y conflicto, se alza el único hospital pediátrico del país, el St. Damien Pediatric Hospital, cuya farmacia trata de garantizar los medicamentos para sus 200 camas y los 80.000 niños enfermos y vulnerables que necesitan ser atendidos de urgencia».

Javier Adsara (Fundación Nuestros Pequeños Hermanos): «En Haití, solo uno de cada 10.000 ciudadanos tiene acceso a la salud, por la falta de estructuras sanitarias, medicamentos y profesionales»

Adicionalmente, el Pleno del Consejo General ha decidido conceder un accésit más de 3.000 euros a la Fundación Hospital Mayo Rey por el Programa de mejora y desarrollo del Servicio de Farmacia Hospitalaria en el Hospital Mayo Rey (Camerún) debido al enorme impacto que tiene en la región y la población donde se desarrolla. De acuerdo con su presidente, Emilio Sastre Huerta «actualmente, la farmacia ya cuenta con personal técnico farmacéutico y un almacén de medicamentos y productos sanitarios. Sin embargo, sigue teniendo ciertas deficiencias en el control de stocks, lo que deriva en faltas de suministro de medicamentos frecuentes y pérdida de fármacos por caducidad. Deficiencias que intentaremos suplir a través de esta nueva fase del proyecto».

Para la concesión de estas ayudas, se ha contado con la valoración previa de la Comisión de Desarrollo Social del Consejo General, que ha seguido un sistema de baremación según las bases de la convocatoria. Conforme a las mismas, se tiene en cuenta que se trate de una entidad que proceda del ámbito farmacéutico o que tenga presencia farmacéutica en su gestión; que promueva la formación/capacitación sanitaria o farmacológica; que integre las normas y protocolos internacionales sobre salud, como son las directrices de la OMS; o su efecto y capacidad multiplicadora.

Estas ayudas se enmarcan dentro de la Estrategia Social de la Profesión Farmacéutica que cumple ahora dos años y que tiene como objetivo canalizar el trabajo de los profesionales farmacéuticos en favor de la sociedad en los próximos años, contribuyendo a acelerar las trasformaciones y retos previstos en la Agenda 2030 y que sitúa la sostenibilidad y los derechos de las personas en el centro de la acción.