Sostenibilidad y rentabilidad: las ventajas del reciclaje

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Laura Zamarriego

@LZamarriego

«No os descubro nada si os digo que el reciclado es algo esencial, algo que solo ofrece ventajas: se mitiga el cambio climático al proteger los recursos naturales escasos de los que disponemos, se genera empleo verde y, consecuentemente, riqueza», ha declarado Guillermina Yanguas, directora general de Calidad y Evaluación Ambiental y Medio Natural del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente.

Así arrancaba el encuentro La innovación al servicio del reciclaje, celebrado en el marco de Sostenibilidad a Debate, el laboratorio de ideas creado por la revista Ethic y la Cátedra de Ética Económica y Empresarial de la Universidad Pontificia Comillas con el objetivo de generar conocimiento en torno a los temas de la Agenda Global 21.

En su intervención, Yanguas ha sentado las bases de la conocida como economía circular, enfrentada a «esa economía lineal de crear, usar y destruir», y que consiste en reintroducir los residuos en los ciclos productivos. Un desafío claramente vinculado con la innovación y sobre el que tanto la Administración como el sector privado tienen algo que decir. «Los fondos públicos se tendrían que plantear como un dinero al que se le debe sacar rentabilidad; el dinero a fondo perdido debería ser un antiguo concepto. Hay que aparcar la teoría de que el medio ambiente tiene que estar subvencionado», ha apuntado.

Aunque, en palabras de Yanguas, el mejor residuo es el que no se genera, lo cierto es que cada español produce al año unos 530 kilogramos de residuos. En total, 24 millones de toneladas anuales en todo el Estado, repartidas entre cerca de 200 vertederos legales y otros miles de basureros ilegales. Son datos recogidos en el informe Un yacimiento en la basura, elaborado por Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra.

La jornada ha continuado con una mesa de debate, donde han tenido voz algunas de las entidades que están liderando el impulso de la I+D+i en la gestión de residuos en España: la Fundación Ecolec (dedicada a la gestión de residuos electrónicos); Signus (de neumáticos); y Ecoalf (del sector textil).

Innovación en la gestión de residuos

España ha pasado de ser el país donde más neumáticos acababan en el vertedero a situarse a la cabeza: hoy se recicla el 50%. Así lo ha indicado José María Bermejo, director de Desarrollo de Mercados de Valorización de Signus Ecovalor. «Y no solamente se trata de utilizar el material reciclado. El balance ambiental, en cuanto a la reducción de emisiones y la huella de carbono, es significativo», ha asegurado. Los neumáticos que Signus gestiona pueden convertirse, por poner un ejemplo, en césped artificial para parques o campos de fútbol. También han elaborado una guía para la gestión del caucho, material que sirve, entre otros, para fabricar suelas de calzado.

El caso de los electrodomésticos es llamativo. Con la crisis, las ventas se han reducido pero, sin embargo, esto no ha supuesto un impedimento en lo que respecta a la generación de residuos. «Si las ventas disminuyen lo lógico sería que disminuyeran los productos a reciclar. Pero el resultado ha sido el contrario. Se reciclan más electrodomésticos con metal pesado; la evolución desde hace diez años no ha hecho más que crecer», ha manifestado Luis Moreno, director general de la Fundación Ecolec. Mientras el objetivo de la Unión Europea es reciclar el 70% de los residuos para 2030, Ecolec se marca un propósito más ambicioso: llegar al 65% en tan sólo cuatro años. Esta empresa lidera proyectos como Weee Trace, que busca asegurar la trazabilidad desde el origen al destino final del flujo de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) mediante el uso de tecnologías avanzadas. Mediante un sistema de radiofrecuencia, materializado en una especie de etiqueta o «matrícula inteligente e interactiva», se permite saber dónde está el residuo y en qué parte del proceso se encuentra, es decir, hacer un seguimiento hasta que llega a la planta de tratamiento. Según ha indicado Moreno, gracias a este sistema se han tratado más de 60 millones de kilogramos pertenecientes a más de 600.000 aparatos.

Dar una segunda vida hasta lo que ahora se había considerado basura es a lo que se dedica Ecoalf, un proyecto de emprendimiento especializado en el sector textil. Prendas fabricadas con botellas de plástico, redes de pesca o posos de café. Creatividad no le falta a este proyecto de moda sostenible. Carolina Blázquez, su directora creativa, veía necesario «elevar el concepto de basura, porque nada es basura hasta que no se le da una segunda oportunidad». «Estamos muy orgullosos de que en nuestras etiquetas aparezca que este abrigo, por ejemplo, eran 100 botellas de agua», ha señalado mostrando al público su abrigo.

Es evidente que, con un buen planteamiento, se multiplican las ideas sobre proyectos sostenibles y rentables en torno al reciclaje. En algo sí han coincidido los representantes del sector: la necesidad de invertir en I+D+i y de encontrar apoyo por parte las administraciones públicas, fomentando el reciclaje más allá del plano teórico. Que no exista una unidad de mercado (hay 17 leyes correspondientes a las 17 comunidades autónomas) no facilita la tarea. Además, para crear una verdadera cultura del reciclaje, la sensibilización –han concluido–­­­ es fundamental para amortiguar el cierto desconocimiento que aún hay en los hogares.