Cómo convencer a tu jefe de que el teletrabajo será un éxito

Durante la pandemia de 2020, el teletrabajo irrumpió en nuestras vidas para quedarse. La digitalización acelerada e impuesta por las circunstancias sanitarias del momento supuso un punto y aparte para el trabajo remoto, una modalidad que, antes de la pandemia, no estaba muy extendida en la mayoría de empresas. Según el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, elaborado por The Adecco Group Institute, el trabajo telemático aumentó un 19% en 2023. Si lo traducimos en cifras, son más de 3 millones de personas las que trabajan telemáticamente en España, más del doble de los empleados que teletrabajaban en 2019, antes del coronavirus. Sin embargo, recientemente el gigante Amazon ha anunciado que su equipo de oficina ya no teletrabajará más a partir de enero de 2025. ¿Estamos ante el fin del teletrabajo?

Esta modalidad laboral no siempre ha convencido a todos, particularmente a los jefes, que son quienes deben determinar si el teletrabajo, con todos sus retos (uso de tecnologías, mejora de la comunicación entre trabajadores) encaja en el buen desarrollo de la compañía. Un estudio de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) ha realizado encuestas a 186 personas –la mayoría tiene más de 45 años, y casi un 45 % son mujeres– de diferentes países europeos para definir los factores determinantes para los directivos a la hora de establecer el trabajo telemático en sus compañías.

La investigación, llevada a cabo por Josep Lladós, el catedrático Antoni Meseguer, Eva Rimbau y Mar Sabadell, profesores e investigadores de los Estudios de Economía y Empresa y miembros del Digital Business Research Group (DigiBiz), nace a partir de la hipótesis de que las personas directivas son la clave para establecer y promover el teletrabajo en las organizaciones. Pero ¿cuáles son las claves para que los jefes piensen que el teletrabajo será un éxito?

Fácil de implantar

Es fundamental que los jefes vean el teletrabajo como algo positivo, y que consideren tener las habilidades necesarias para dirigir equipos en esta modalidad. Los jefes, a la hora de adoptar el teletrabajo, necesitan ver que es una estrategia útil para la organización y fácil de implantar.

Mejora del rendimiento

«Los jefes pueden medir la mejora del rendimiento laboral a través de indicadores como la cantidad de tareas llevadas a cabo, el desempeño de objetivos, la calidad del trabajo entregado, el absentismo… A pesar de que es difícil cuantificar objetivamente el impacto del teletrabajo en la eficiencia y la productividad, la percepción positiva de los jefes sobre cómo afecta a sus tareas influye en la visión de utilidad», asegura Eva Rimbau.

Confianza en los resultados

«Es imprescindible que los mánager tengan confianza en las personas trabajadoras y gestionen sus equipos teniendo en cuenta resultados u objetivos, no la presencia o el número de horas trabajadas», aclara Rimbau. A mayor confianza, mayores posibilidades de conseguir resultados positivos, ya que los trabajadores y trabajadoras acaban por asumir, de manera proactiva, más responsabilidades en aras de satisfacer las cargas de trabajo.

A mayor confianza, mayores posibilidades de conseguir resultados positivos

Confianza en la gestión

La falta de contacto directo (cara a cara) y las dificultades para coordinar son algunos de los retos que los jefes ven a la hora de hacer efectivo el teletrabajo. La confianza de los superiores en sus capacidades para gestionar y supervisar un grupo desde la distancia es fundamental, según la investigación, para que el teletrabajo tenga plena aceptación: para conseguir esta autopercepción «los jefes tienen que desarrollar habilidades para construir, motivar, reconocer y responsabilizar a los equipos en una situación de teletrabajo, empleando herramientas digitales para comunicarse e interactuar eficazmente. Deben evitar el aislamiento profesional, fomentar la colaboración y la confianza, y adaptar el liderazgo y la supervisión al contexto digital», apunta Rimbau. Los trabajadores y trabajadoras necesitan jefes que lideren el desarrollo de los equipos, sea cual sea la modalidad laboral. Para ello, los jefes también requieren el respaldo de los altos mandos de la empresa. Si las grandes empresas de referencia en el sector y la alta dirección de la compañía apoyan el teletrabajo, las personas que ocupen roles directivos serán más proclives a aceptarlo.

La falta de contacto directo (cara a cara) y las dificultades para coordinar son algunos de los retos que los jefes ven a la hora de hacer efectivo el teletrabajo

Uso de las tecnologías

Rimbau señala que «cuanto más digitales y basadas en el conocimiento sean las actividades de una empresa, más fácil será aplicar el teletrabajo de forma extensiva y exitosa». Las barreras tecnológicas pueden llegar a lastrar la implantación del teletrabajo, ya que esta modalidad se apoya en el uso de las nuevas tecnologías para las comunicaciones y gestiones. Es esencial que tanto las personas trabajadoras como la empresa dispongan de los medios adecuados para ello y que digitalicen sus procesos laborales.