Más del 70% de los agricultores ya ha sufrido el impacto del cambio climático

El 71% de los agricultores afirma que el cambio climático ya está teniendo un gran impacto en su explotación, y todavía más dicen que están preocupados por el impacto que podrá tener en el futuro. Se estima que sus ingresos se han reducido un 15,7% de media debido al cambio climático en los dos últimos años, e incluso uno de cada seis identifica pérdidas de ingresos superiores al 25%. Así lo encontró la encuesta de Bayer «Farmer Voice» («La voz del agricultor»), que revela los retos a los que se enfrentan los agricultores de todo el mundo al intentar mitigar los efectos del cambio climático y adaptarse al futuro. En esta, se entrevistó de forma independiente a 800 agricultores de todo el mundo que representasen explotaciones grandes y pequeñas de Alemania, Australia, Brasil, China, Estados Unidos, India, Kenia y Ucrania a partes iguales.

Rodrigo Santos, miembro del Consejo de Dirección de Bayer AG y Presidente de Bayer Crop Science, comentó que «los agricultores ya están experimentando los efectos adversos del cambio climático en sus campos y, al mismo tiempo, desempeñan un papel clave para hacer frente a este gran desafío; por eso es tan importante poner su voz en primer plano: las pérdidas registradas en esta encuesta ponen de manifiesto la amenaza directa que supone el cambio climático para la seguridad alimentaria mundial». Y es que los agricultores esperan que las repercusiones del cambio climático continúen: tres cuartas partes de ellos están preocupados por el impacto que el cambio climático tendrá en su explotación, especialmente en Kenia e India.

Aunque el cambio climático es un tema dominante, los retos económicos son la mayor prioridad en los próximos tres años. Más de la mitad (55%) de los agricultores sitúan los costes de los fertilizantes entre los tres principales retos, seguidos de los costes energéticos (47%), la volatilidad de los precios y los ingresos (37%) y el coste de la protección de los cultivos (36%).En Ucrania, por ejemplo, el 70% de los agricultores mencionó el coste de los fertilizantes como uno de los tres principales retos; además, el 40% mencionó la disrupción general que ha producido la guerra.

Medidas para mitigar el impacto

Sin embargo, más del 80% de los agricultores encuestados ya están adoptando o tienen previsto adoptar medidas que contribuyan a reducir los gases de efecto invernadero. Las principales áreas de interés son el uso de cubiertas vegetales (el 43% ya lo hace o tiene intención de hacerlo), el uso de energías renovables o biocombustibles (37%) y la utilización de semillas innovadoras para reducir el uso de fertilizantes o productos fitosanitarios (33%). En paralelo, todos y cada uno de los agricultores encuestados afirman aplicar ya o tienen previsto aplicar medidas de ayuda a la biodiversidad. Incluso, más de la mitad (54%) afirma haber tomado medidas para proteger a los insectos o tiene previsto hacerlo en los próximos tres años.

El uso eficiente de la tierra, la diversificación de cultivos y la mejora de la salud del suelo son las vías más importantes para el éxito

Para estar preparados para el futuro, la innovación juega un rol importante. Más de la mitad de los agricultores (53%) afirma que el acceso a semillas y rasgos para afrontar mejor las condiciones meteorológicas extremas sería lo más beneficioso para su explotación. Un número similar (50%) reclama una mejor tecnología de protección de los cultivos y el 42% afirma que un mejor acceso a la tecnología de irrigación beneficiaría a su explotación. En cuanto a sus prácticas, la mejora del uso eficiente de la tierra, la diversificación de cultivos y la mejora de la calidad y la salud del suelo son las vías más importantes para el éxito.

En general, la encuesta demuestra que los agricultores de todo el mundo comparten una visión común sobre los retos actuales y las perspectivas de futuro. Aunque existen ligeras diferencias entre países, los problemas comunes generados por el cambio climático y las presiones económicas preocupan a todos por igual. No obstante, casi tres cuartas partes dicen sentirse positivos sobre el futuro de la agricultura en su país. «Esto es sorprendente y alentador: las opiniones expresadas por los agricultores en el informe deben ser una llamada a la acción para que todo el sistema alimentario innove, colabore y ofrezca las soluciones que los agricultores necesitan», afirmó  Rodrigo Santos. Pues, ante el crecimiento de la población mundial, estos hallazgos deben servir de catalizador para adoptar medidas que fomenten modelos de agricultura regenerativa.