Medicina digital para un mundo más humano

Habrá quien, al escuchar hablar de digitalización de la medicina, piense inmediatamente en máquinas futuristas pasando consulta en los hospitales, quirófanos poco menos que de ciencia ficción o tratamientos de reminiscencias espaciales. Si bien es posible que estas imágenes tengan cabida en la próxima saga de Marvel, la realidad es que, en el día a día, el proceso es sustancialmente diferente y mucho más anclado en las necesidades reales de la sociedad.

La denominada «digitalización», una suerte de modernización en pos de aprovechar las nuevas herramientas a disposición de la sociedad, plantea un nuevo horizonte en el sector médico. Uno en el que la relación facultativo-paciente se ve potenciada y donde a la atención presencial se le suma la posibilidad para el enfermo de estar constantemente conectado con su médico a través de la tecnología.

Su potencial está fuera de duda. Al menos así lo evidencian los datos incluidos en la última memoria publicada por Sanitas, una de las compañías de referencia en el sector. Según este informe, la videoconsulta se ha consolidado entre médicos y pacientes, contabilizando 782.000 gestiones de este tipo realizadas durante 2021 y más de 3.200 médicos de 37 especialidades disponibles a través de estos nuevos canales. A esta comodidad, agilidad y eficacia en el servicio al paciente, el año pasado Sanitas sumó la inteligencia artificial para la mejora del servicio de videoconsulta de urgencias 24 horas.

La digitalización de la medicina también es verde: Sanitas evitó la emisión de más de 8.000 toneladas de CO2 en un año gracias a las videoconsultas

Y es que, impulsado por los efectos de la pandemia de coronavirus, el tren de la digitalización ha resultado imparable. En un tiempo récord, la medicina ha abrazado el futuro hasta el punto de que una persona pueda, –a través de su propio teléfono y otros dispositivos portátiles (wearables)–, medir sus constantes vitales mediante un simple reconocimiento facial, permitir que su médico de confianza monitorice tratamientos en curso o incluso disponer de una videoconsulta con un facultativo en el mismo día. Los usuarios ya pueden disfrutar este tipo de prestaciones a través de servicios como BluaU, desarrollado por Sanitas y que, lejos de estancarse, continúa explorando nuevas funcionalidades.

Sin embargo, si algo ha quedado claro en los últimos años, es que la salud de las personas no se entiende sin tener en cuenta la del planeta. Por eso, cualquier intento de avanzar hacia el futuro debe implicar el consiguiente esfuerzo por consolidar una actividad lo más sostenible posible. Nuevamente, empresas líderes como Sanitas –que el año pasado invirtió más de tres millones de euros en eficiencia energética– tienen la responsabilidad de marcar el camino en su sector. Un camino para el que la digitalización vuelve a revelarse como el compañero de viaje ideal. De hecho, gracias a la tecnología implementada, Sanitas ha logrado evitar la emisión de más de 8.000 toneladas de CO2 en un solo año.

Es la ruta a seguir: una en la que la tecnología –esa que resulta tangible en el día a día– aporte su granito de arena a la hora de hacer un mundo más saludable y, por ende, más humano.