Aumentan un 19% los contratos a personas con discapacidad

Las contrataciones de personas con discapacidad han aumentado un 19%, según la última Encuesta de Población Activa (EPA), que también refleja un incremento del 17% en el colectivo de los mayores de 45 años.

«La gestión de la diversidad es la bisagra para que el sector privado se integre positivamente en la recuperación económica», apunta Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco. «Y gracias a ello» -advierte- «el nivel de contrataciones ha superdado al registrado antes de la crisis económica».

En este sentido, cabe señalar que las personas mayores de 45 años han sido uno de los grupos más afectados por la destrucción de empleo, llegando a representar más del 40% de los desempleados. «Por pura estadística y con la reactivación de la economía, ahora empiezan a recuperar lo que habían perdido», señala.

Las personas con discapacidad también sufrieron de manera evidente y directa los envites de la crisis, «pero afortunadamente, y más allá de la ley que les ampara, las empresas empiezan a entender los valores extra que aportan a los equipos de trabajo: esfuerzo, motivación y sacrificio».

¿Cuál es el perfil?

El perfil del trabajador en riesgo de exclusión es muy concreto. Un 67% son mujeres. Según Mesonero, este hecho «se debe a tics sociales y culturales que aún están asentados en nuestra sociedad, y que se traducen en un temor de las empresas a las bajas por maternidad o a la conciliación”.

En cuanto al grupo de edad, un 40% ha superado los 45 años. A pesar de que los demandantes de esta edad están copando la mayor parte del trabajo creado, no hay que olvidar que siguen enfrentándose a importantes prejuicios y estereotipos relacionados con una no siempre real desactualización de competencias, advierten desde la Fundación Adecco.

Además, el 42% tiene sólo estudios elementales, mientras un escaso 6% cuenta con estudios universitarios. En efecto, en nuestro mercado se cumple el precepto de «a mayor formación, menos paro», lo que evidencia que un nivel formativo básico aumenta las posibilidades de exclusión social.

De los datos que maneja la Fundación Adecco se desprende que la actividad donde más se ha integrado a personas en riesgo de exclusión ha sido el sector servicios (54,9%), siendo los puestos de administrativo, teleoperador y operario de limpieza los más habituales. Eso sí, el tipo de contrato más frecuente fue el temporal por Acumulación de Tareas, con un 48,7%. El contrato en prácticas ocupó el segundo lugar, con un 24,8%, seguido de la sustitución, con un 5%.