Un reconocimiento a la defensa de la naturaleza

¿Sabías que en Doñana se pueden observar más de 300 especies diferentes de aves? El Parque Nacional andaluz es una verdadera explosión de sonido, color y vida tanto para sus habitantes con plumas como para los humanos que se acercan a conocerlo. José Antonio Valverde fue una de las personas que más luchó para proteger este espacio y uno de los máximos valedores que logró que este tesoro natural que nos pertenece a todos no desapareciese en favor del beneficio económico de unos pocos.

Valverde fue galardonado en 1999 con el Premio Fondena, un reconocimiento que entrega cada dos años la Fundación Fondo para la Protección de la Naturaleza (Fondena) a aquellas entidades, personas, instituciones o grupos de trabajo cuya labor creadora o de investigación represente una contribución importante para la conservación de la fauna y flora de España.

Hasta el 30 de marzo se pueden enviar candidaturas al Premio Fondena, dotado con 30.000 euros

La entidad, una de las fundaciones para la protección de la naturaleza más veteranas de España, fue creada en 1982 con el fin de promover y asegurar la supervivencia de los recursos naturales, promoviendo actividades educativas y científicas. Desde su creación, Fondena ha contribuido en varios proyectos como la conservación del lince ibérico, la protección y recuperación del quebrantahuesos en el Pirineo español o el mantenimiento del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega de la Serrezuela (Segovia), que constituye un enclave de gran importancia para las aves ibéricas, contando con una de las principales colonias de buitres leonados del país.

Hasta el próximo 30 de marzo se pueden enviar candidaturas para la XII edición de este premio, cuyo ganador se conocerá antes del 1 de octubre de 2019. El que lo consiga, se llevará un diploma y una dotación en metálico de 30.000 euros. Además, se unirá a nombres como el propio José Antonio Valverde, Adena/WWF, el Real Jardín Botánico de Madrid, Benigno Varillas o Miguel Ángel Ferrer, que lograron alzarse con el galardón en ediciones anteriores como reconocimiento a una labor que, además de proteger la naturaleza, pone en valor el patrimonio (natural) de todos.