Uno de cada cuatro niños, ante el abismo de la pobreza

El estudio pone de manifiesto que la pobreza en España sigue teniendo rostro de niño. En general, su incidencia está más extendida y es más severa e intensa en la infancia que en el resto de la población. Y, analizando los datos por tipo de hogar, la tendencia se confirma: los hogares con niños son significativamente más pobres que la media y que los hogares sin niños.

Junto a los indicadores de bienestar, España tiene unas tasas muy altas de fracaso escolar, 23%, y de abandono escolar ,23,5%, la más alta de la UE. Las becas y ayudas de comedor y libros, dos elementos clave para reducir la desigualad en el acceso a la educación, se han visto muy afectadas en los últimos años. La inversión en becas de libros o sistemas de préstamo se ha reducido en un 45% desde 2008.

La evolución del bienestar y de la igualdad de oportunidades en la educación refleja que las políticas de infancia no están siendo efectivas para frenar la pobreza y la desigualdad. Nuestro país es, tras Grecia, el segundo de la UE con menos capacidad para recortar la pobreza infantil: España hace un esfuerzo de inversión en políticas de protección social de la infancia muy inferior a la media de la UE, con un gasto por habitante de 270€ al año frente a 510€ de la media europea.»No es posible, en ninguna parte del mundo, luchar contra pobreza y la desigualdad sin una inversión suficiente para abordar de forma eficiente todas las medidas necesarias», dijo Carmelo Angulo, presidente de Unicef Comité Español, al hilo de estos datos.

De seguir esta evolución, España estará ante dos difíciles escenarios: un país con cada vez menos niños, o un país roto por la brecha de las desigualdades. Otros escenarios son posibles, pero para ello es necesario un consenso social y político que permita un nuevo enfoque centrado en el bienestar de las personas y más estratégico respecto a la infancia. «Porque en la pobreza infantil está el germen de una sociedad más pobre y más desigual en el futuro«, puntualizó Carmelo Angulo.

La suma de todos los datos y argumentos que recoge el informe ha llevado a Unicef Comité Español a señalar la urgencia de un Pacto de Estado por la Infancia, que implique a todos: administración privada y pública, así como las organizaciones y plataformas sociales. «Es necesario completar un tratado que blinde los derechos de un sector de la población que no tiene recursos por sí mismo: la infancia. Porque su bienestar tiene repercusiones a medio y largo plazo sobre todo el país», dijo Angulo.