El paro se ceba con las personas con enfermedad mental

Si las tasas de paro marcan cifras récord en España, para el colectivo de las personas con enfermedad mental, cuyo acceso al mercado laboral se enfrenta a numerosas barreras, las cifras están disparadas. El 80% de las personas afectadas por un trastorno mental grave está desempleada en este momento, según datos de la Asociación Feafes.

La presidenta de Feafes, Anna Cohi, explicó durante la presentación de la Fundación Empleo y Salud Mental que este grupo, integrado por 1,2 millones de personas, ha llegado más tarde al acceso al empleo si lo comparamos con otros colectivos del mundo de la discapacidad. Cohi reclamó que se mejore el nivel de formación de las personas con enfermedad mental, así como los apoyos para el acceso al empleo y el mantenimiento del mismo.

Desde Feafes alertan sobre el impacto económico del trastorno mental, al asegurar que éste supone el 20% del gasto sanitario de los países desarrollados y que en España alcanza el 1% del PIB. También ha apuntado que la gran mayoría de estas personas -el 80%- padece esquizofrenia. «No sólo se mejora la calidad de vida de este colectivo, sino que se reduce el gasto en cuidados sanitarios», añadió.

Por su parte, el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno, señaló que «la salud mental es una cuestión de Estado con la que convivimos diariamente en nuestro entorno más cercano. Cerca del 27% de los hombres y más del 20% de las mujeres en España manifiestan algún tipo de trastorno a lo largo de sus vidas».

Nuevo modelo legal

El presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, advirtió que los problemas de salud mental forman parte de un sector «emergente» en las sociedades avanzadas y ha afirmado que las demandas del mismo tienen una respuesta «muy insatisfecha» tanto de lo público como de lo privado.

Pérez Bueno ha incidido en la creación de un «nuevo modelo legal de inclusión social y laboral» de este colectivo y ha afirmado que dentro de la discapacidad hay «exclusión sobre la exclusión». Así, ha indicado que uno de los grupos que está especialmente afectado por esa «ausencia» de acceso al empleo es el de las personas con trastorno de salud mental, para el que ha pedido una «acción de discriminación positiva».